Aprende a identificar el síndrome del impostor y la forma en que te está afectando.
Recientemente se habla mucho del síndrome del impostor. Ese malestar emocional causado por no sentirnos merecedoras del éxito que logramos o bien que al dudar de nuestras habilidades aún cuando son ampliamente reconocidas por otros. Si bien todo mundo puede padecerlo, es más común que se dé en las mujeres. Aquí te dejo 10 puntos para entender qué es el síndrome del impostor y saber cómo te afecta.
10 hábitos para convertirte en la mujer independiente que siempre quisiste ser
10 puntos para entender el síndrome del impostor y cómo te afecta
1. Fue descubierto por dos psicólogas francesas
En 1978, las psicólogas francesas Pauline Clance y Suzanne Imes realizaron con el cual se dieron cuenta que muchas mujeres profesionalmente exitosas no se sentían lo suficientes o que merecieran los logros que habían obtenido. Tras realizar algunos estudios más, ambas psicólogas acuñaron el término de «síndrome del impostor» para hablar de esta autopercepción de inferioridad e insuficiencia.
Decretaron que existían dos tipos de causas que podían propiciar este síndrome: internas y externas. Las internas podían ser poca confianza en una misma, baja autoestima, etc. Las externas, patrones familiares, estereotipos sociales, diferencias salariales, etc.
2. No se sabe a ciencia cierta qué puede ocasionarlo
Si bien a raíz del estudio realizado por ambas psicólogas comenzaron a identificarse posibles causas de este síndrome, aún en la actualidad no se sabe con certeza lo que lo ocasiona. Sin embargo, lo que sí se ha podido hacer es identificar algunas de las características más comunes para poder saber si uno padece o no este síndrome del impostor y poder entender de qué manera le afecta.
3. Ocasiona que uno sienta que es un fraude y causa temor el pensar que podrían descubrirte
Otra manera de llamar al síndrome del impostor es «el síndrome del fraude». Esto es así precisamente porque las personas que lo padecen tienden a sentir que en realidad son unos fraudes, sólo que las personas a su alrededor no se han dado cuenta. Piensan que ninguno de sus méritos ha sido conseguido por sus habilidades sino por mera suerte y la idea de ser descubiertos en su supuesta farsa les aterra.
4. Demasiado perfeccionismo
Una de las características de quienes desarrollan este síndrome es ser demasiado perfeccionistas. Justamente porque sienten que su trabajo por sí solo no es suficiente, tienden a autoexigirse demasiado para poder cubrir esta «falta de talento» que piensan tener. Sin embargo, mientras que el síndrome del impostor no se solucione, jamás sentirán que su trabajo está completo, volviéndose demasiado perfeccionistas y sin ser conscientes de cómo esto les afecta.
5. Causa mucha inseguridad en la persona que lo padece
Otra característica para aprender a identificar el síndrome del impostor es la enorme inseguridad que genera en la persona que lo padece. Sentir constantemente que su trabajo no es suficiente, que uno mismo no es suficiente y que haga lo que haga no puede remediarlo, por supuesta que ocasiona que uno se vuelva inseguro de sí mismo. No puedes confiar en tus habilidades, en la calidad de tus pensamientos, en tu forma de expresarte.
6. Pensar que el éxito debe conseguirse a la primera contribuye a que este síndrome se desarrolle
Actualmente y desde hace un tiempo se repite demasiado la idea de que el éxito es una cuestión inmediata. Si bien todos somos conscientes de que para alcanzarlo se requiere tiempo y esfuerzo, el que en redes sociales y otros medios se nos bombardee constantemente con la idea del éxito inmediato hace que en algún punto interioricemos esta falsa cuestión. Los fracasos y tropezones (tan normales y necesarios en la vida) quedan invisibilizados haciendo que las personas se sientan terriblemente avergonzadas si llegan a cometer errores.
7. Puede generar ansiedad y depresión
Para sorpresa de nadie, otra de las formas en que afecta este síndrome del impostor es en tu salud mental al propiciar el desarrollo de ansiedad y depresión. Por supuesto, tanto estrés constante, sentir que tu trabajo no vale, estar con los nervios de punto temiendo que te descubran, pensando que tú misma no eres suficiente… claro que la ansiedad y la depresión pueden aparecerse aunque no hayan sido invitadas.
8. Las mujeres son más proclives a padecerlo
Como ya habíamos dicho al inicio, se ha demostrado que las mujeres somos más proclives a padecer este síndrome. Y claro, como veremos en el punto anterior, mucho se lo debemos a la cultura machista en que vivimos. Está demostrado que el 80% de los puestos directivos en las empresas son ocupados por los hombres. ¡El 80%! Y entre muchas otras razones una de ellas es porque las mujeres, a pesar de estar preparadas (y a veces más que muchos hombres) no sienten que sean los suficientes y ellas solitas se echan para atrás.
9. La cultura machista afecta mucho
La falta de referentes femeninos en los medios, el reforzamiento de los estereotipos sexistas, los obstáculos que se le ponen constantemente a la mujeres… todo esto es parte de la cultura machista y parte del por qué las mujeres tienden a ser más afectadas por el síndrome del impostor. Este machismo no hace más que repetir el discurso de que las mujeres no son suficientes en el trabajo, que sus logros se los deben a otros hombres, que no es que sean talentosas sino suertudas. Si una crece constantemente escuchando esos discursos por supuesto que los interioriza en algún punto.
10. No hay un diagnóstico clínico
Finalmente, es importante decir que no existente un diagnóstico clínico para el síndrome del impostor. Es decir, a diferencia de la ansiedad y la depresión, si vas con un especialista no te dirá «después de los exámenes realizados, lo que usted padece es este síndrome». Eso no sucede. Sin embargo, no por ello no es tratable por especialistas de la salud mental como los psicólogos. Al ser un problema que afecta significativa a la cuestión emocional y anímica de una persona, este puede ser tratado en terapia.
… Bueno, y si lo tengo ¿qué hago para superarlo?
Ya que terminamos de revisar estos diez puntos, quiero incluir este último apartado de pilón para no dejarte sin posibles alternativas. Como todo en la vida, si descubres que tienes el síndrome del impostor puedes solucionarlo. Aquí te van unos tips:
- Pregúntale a las personas que estimas por qué te quieren.
- Festeja más tus éxitos.
- Normaliza el fracaso
- Confía en que la gente no miente cuando reconocen tus habilidades
- Agradece los cumplidos y nos los rechaces
- Si sientes que te está afectando de más y tú solita no puedes, busca ayuda y ve a terapia
10 consejos para trabajar el amor propio desde ya
