Mirada penetrante, sonrisa de modelo, inteligente, gracioso y exitoso. A primera vista el hombre con el que sales es una maravilla, uno en un millón pero hay […]
Mirada penetrante, sonrisa de modelo, inteligente, gracioso y exitoso. A primera vista el hombre con el que sales es una maravilla, uno en un millón pero hay algo que no sabes…
Detrás de esa máscara de príncipe azul, ese hombre es todavía un niñito inmaduro que antes que amor, busca alguien que le infle el orgullo y más que necesitar una novia, requiere una mamá que ande detrás de él y unas buenas dosis de ubicatex.
Si detectas algunas de estas señales, mejor corre, aléjate y cuéntale a quien más confianza le tengas:
1. Es totalmente diferente en facebook o en twitter que de frente
Muchos hombres inmaduros son mucho más seguros cuando hablan contigo por whatsapp o por Facebook, que cuando están contigo en persona. Es realmente molesto, ya que no sabes cuál es su verdadera personalidad.
2. Carece de ambiciones
Es incapaz de salir de su zona de confort. Lo malo de estar con un hombre sin ambiciones es que nunca aspirarán a nada y tú te sentirás que lo estás arrastrando y presionando todo el tiempo. Está tan cómodo que no se mueve ni en defensa propia.
3. Todo es acerca de él
Tiene una perspectiva ególatra y dramática de las cosas. Todo se centra en él, para bien o para mal. Los defectos no serán culpa suya, sino tuya o de los demás. Pero eso sí, las cosas buenas, serán gracias a él y a sus maravillosas cualidades.
4. El y su orgullo son la pareja perfecta
Pocas cosas tan grandes como su orgullo. Es incapaz de decir que se equivocó o de aceptar algo que dañe su orgullo. Y si eres tu quien lo dañas, arremeterá contra tí. A nadie le gusta tragarse su orgullo, pero tienen que poner en una balanza qué es más importante para cada uno.
5. No sabe comunicarse
La prueba más clara de esto es cuando en una discusión por teléfono, termina colgándote en lugar de discutir tranquilamente como un hombre maduro. Este detalle los sentencia a peleas, discusiones y malos ratos por no saber hablar. Si él no está dispuesto a escucharte, se aleja o se guarda todo hasta que explota el problemón del siglo, entonces dile adiós.
6. Sus principales armas son la manipulación y el chantaje emocional
En medio de una discusión, no muestra argumentos lógicos, sino manipulación y chantaje emocional. Son los clásicos que si quieres salir con tus amigas o con un amigo, no es capaz de decir por qué no quiere que lo hagas, sino que se basan en un «entonces no me quieres» o «entonces te doy lo mismo».
7. Es incapaz de demostrar sus sentimientos
No esperes de él una demostración de afecto significativa. No puede expresar enojo, tristeza o amor en una forma especial. Tal vez expresa sus sentimientos de formas inapropiadas como la tristeza en forma de enojo o el enojo en forma de agresión.
8. No puede hacerse responsable de algo
En el peor de los casos vive con sus padres y aún ellos se encargan de la renta, la comida, la ropa y varios gastos, pues es incapaz de hacerse responsable de una casa, no sabe lo que es vivir por él mismo y ser independiente pues siempre ha tenido a alguien que vea por él.
9. Para él no existe la palabra compromiso
Y esto se refiere a que el título de pareja sólo existe cuando conviene. Es incapaz de comprometerse para algo, tan sencillo como un plan por la tarde, porque rompe ese plan por irse con sus amigos como comprometerse para hacer planes a futuro.
10. Romper con él vendrá como decisión tuya, no de él
Es de los clásicos de «Pues si tengo tantos defectos, ¿por qué no me cortas, ya?» Romper con él no vendrá de su boca, pues no puede enfrentar las consecuencias de sus actos, ni la carga de lo que él decide. No esperes a que él tome el valor y tome una postura.
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