Tal vez no lo sabías, pero existen distintas formas de dibujar mandalas y cada una de ellas tiene beneficios que jamás imaginaste, ¿ya los conoces? 1. Forma […]
Tal vez no lo sabías, pero existen distintas formas de dibujar mandalas y cada una de ellas tiene beneficios que jamás imaginaste, ¿ya los conoces?
1. Forma terapéutica para lo cual es importante que busques a un profesional o un taller de mandalas donde te llevarán de la mano, camino al entendimiento de tu personalidad y el autoconocimiento, así como a sacar lo mejor de ti mismo y transformar lo necesario.
Uno de los procesos consiste en trabajar desde el interior hacia el exterior o del exterior hacia el interior, lo que nos lleva a movernos y ser más flexibles en la vida. Asimismo, en el proceso terapéutico se trabaja con la polaridad y la experiencia; Por ejemplo, al hablar de los colores brillantes, blanco, negro, gris, surgen preguntas como, ¿qué sientes? ¿qué experimentas con colores?, ¿qué pasa cuando sólo se trabaja con negros y grises?; También se trabaja pidiendo a la persona que termine las formas geómetras y las dibuje, con el fin de ver qué continuidad le da cada paciente …
Otra característica es la posibilidad de trabajar pérdidas, depresión o situaciones especiales que determinará el terapeuta. Por ejemplo, el mándala que proponen los budistas con arena de colores incluye una ceremonia de iniciación de los monjes, cantos y bailes. Terminado el mándala, se hace un ceremonia de clausura destruyéndolo, para entender lo efímero de las cosas.
Esta terapia fortalece el cerebro, ya que se trabaja con ambos hemisferios del cerebro; (Izquierdo: lenguaje lógica y matemáticas. Derecho: sentimientos, emociones, sexualidad, espiritualidad, imaginación y creatividad).
Se puede realizar un trabajo terapéutico de mándalas con sueños, tratando de dibujarlos, dimensionarlos y ponerlos en el presente. .
2. Forma intuitiva o libre
Dentro de esta modalidad, existen 2 formas de hacerlo: coloreando mándalas, previamente dibujados; o creando el mándala, haciendo la parte geométrica e iniciando con un papel en blanco.
De esta forma, se estimulan las diferentes funciones mentales como la atención, la concentración, la percepción, la coordinación, así como la capacidad de elección, creatividad y de expresión, además de fomentar la relajación. Asimismo, no hace falta ningún conocimiento previo, ni tampoco querer entenderlo, hay que disfrutar la experiencia, como los niños.
Como uso terapéutico, los mándalas tienen como propósito controlar el estrés, la depresión, y, además, ayudan a la concentración, a calmar la ansiedad y sirven como catalizadores de la energía interior (positiva o negativa).
Algunas recomendaciones
- Elige un lugar tranquilo, sin ruido y luz adecuada. Puedes acompañar tu proceso con música que te inspire.
- Elige una mándala que para ti tenga algún significado o te llame la atención. El material para pintar dependerá del gusto y del presupuesto que tengas; pueden ser óleos, pasteles, pinceles etc. ¡Usa tu creatividad!
- Conéctate con tu interior, detecta tus emociones, observa cuál es tu estado de ánimo y cómo evoluciona durante el proceso, respira, disfruta … y, finalmente, revisa qué sentiste y tu emoción al terminar el mándala.
- No empieces varios mándalas a la vez, comienza uno y termínalo.
- Obséquiate ese espacio de traer a ti esa emoción, recuerdos, símbolos que llegan a tu mete …
Cabe señalar que uno de sus usos es la meditación; nos ayuda a desarrollar la conciencia, la expresión del alma, la intuición, la comprensión hacia otras personas, así como despertar la creatividad y los sentidos, además de servir de apoyo en ceremonias y rituales.
Mediante símbolos y figuras, el mándala te ayudará a entender qué pasa en tu interior. Al escoger los colores, al pintar, tu inconsciente se está expresando y esta herramienta te permite hacerlo consciente.
En Tarots del mundo puedes encontrar múltiples herramientas que te ayudarán a despertar tu voz interior y a potencializar tu ser para lograr la plenitud!
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