Para adelgazar no necesitas matarte de hambre ni pasar horas en el gimnasio. Con estos trucos infalibles para perder peso sin sacrificios verás qué sencillo es. Ojo, digo […]
Para adelgazar no necesitas matarte de hambre ni pasar horas en el gimnasio. Con estos trucos infalibles para perder peso sin sacrificios verás qué sencillo es.
Ojo, digo sencillo, ¡no rápido! Adelgazar sin rebotes y de forma saludable requiere hacer cambios sutiles, graduales y, sobre todo, duraderos. Cambios fáciles que puedas mantener y que no representen una tortura para ti. Por eso, estos 10 trucos infalibles para perder peso sin sacrificios van a hacer maravillas por tu salud y tu figura pero, sobre todo, te sentirás tranquila y sin presiones porque serán parte de tu vida.
1.- Come en platos más pequeños. Generalmente nos servimos porciones que ocupan todo el plato. Mientras más grande sea éste, más alimento le cabe y por lo tanto, más vas a comer. Por eso se recomienda que elijas platos más pequeños pues te dará la sensación de comer bastante aunque no sea mucho. Claro, ¡no te vuelvas a servir!
2.- Haz cardio. El ejercicio cardiovascular es tu mejor herramienta para perder grasa y peso. Lo ideal es aumentar tu frecuencia cardiaca al porcentaje de quema de grasa y mantenerla por al menos 30 minutos, unas tres o cuatro veces a la semana. Puedes correr, bailar, brincar en tumbling, nadar, caminar a paso rápido, brincar la cuerda. Mientras mayor intensidad del ejercicio, ¡mejor! El chiste es encontrar una actividad que te guste y disfrutes, para que la hagas parte de tu vida.
3.- Y acompaña con resistencia muscular. El músculo requiere de más calorías que la grasa, por lo que un mayor porcentaje de masa muscular en el cuerpo es benéfico para alcanzar el peso deseado y además, mejora tu metabolismo. Acompaña tus rutinas de cardio con pesas, yoga, ejercicios con tu propio peso o cualquier disciplina que incremente tu masa muscular.
4.- Aprovecha todos los nuevos programas de ejercicio rápidos. Cada vez hay más sistemas que te ofrecen ejercitarte en poco tiempo, trabajando tu cuerpo. Es mucho mejor hacer estos todos los días o unas 5 o 6 veces a la semana, que matarte horas en el gimnasio un día. Con poca actividad, pero constante, tienes.
5.- Duerme bien. Si no duermes, tu sistema hormonal se desbalancea y ocasiona que generes más hormonas del hambre, como la leptina o el cortisol, que te harán querer comer azúcares y grasas para mantenerte despierta. Si un día te acuestas tarde, no pasa nada, ¡pero imagina hacerlo diario! Además, durante el sueño tu organismo elimina toxinas y se regenera, por lo que si no duermes al menos 7 horas, no funcionará correctamente y te será imposible perder peso, por más que lo intentes. ¡El sueño es necesario!
6.- Sube escaleras, camina cuando puedas, ¡muévete! Mientras más activa estés en el día, más calorías quemarás y más activo mantendrás tu metabolismo, lo cual va sumando para perder peso. Unos cien escalones por aquí, unos 150 pasos por allá… ¡todo cuenta! Lo padre es que son pequeñas acciones que no representan un gran esfuerzo, pero que sumadas te ayudan mucho. ¡Inténtalo una semana y ve los resultados!
7.- Come con inteligencia. Recorta algunas calorías extra de tu café diario o de la ensalada con cientos de toppings; alterna la crema por yoghurt sin grasa; prefiere un buen chocolate de verdad a la golosina con puros químicos de la tiendita… Comer con inteligencia no solo te dará más salud, sino que cortarás calorías de tu día de forma inteligente, pero sin sacrificios enormes. Adelgaza haciendo sustituciones inteligentes con estas ideas.
8.- Si compras golosinas, busca que todas sean iguales. Es decir, por ejemplo, las lunetas o las gomitas, está comprobado que comerás más si son de distintos colores. En cambio, si son de un mismo sabor o color, comes menos. Considerálo cuando compres golosinas o botanas que vengan en estos formatos.
9.- Come más porciones más pequeñas. Es mejor comer más veces al día y menos cantidad, que hacer comidas enormes. Hay varias razones: tu metabolismo se atienen en funcionamiento y trabajando, no pones a tu organismo en «ayuno» o en «reserva de energía», la digestión es más sencilla, no se distiende tanto el estómago y quedas satisfecha con menos cantidad de calorías… Pruébalo y verás.
10.- Busca la variedad. Tanto en el ejercicio como en la alimentación, lo mejor es variar para que tu cuerpo no se acostumbre al mismo esfuerzo o nutrientes, ya que esto lo pone en un estado de calma, digamos, no hay sorpresas. En cambio si varías constantemente el tipo de actividad física y la alimentación, tu cuerpo requiere más esfuerzo para acostumbrarse y eso ayuda a bajar de peso… ¡bueno, claro, a menos que tu variedad tenga que ver con cambiar el pastel por unas papas fritas, jaja!
¿Verdad que estos trucos infalibles para perder peso sin sacrificios no se ven tan complicados? Pruébalos una semana y ve los resultados. Sé creativa en la forma cómo puedes implementarlos y sobre todo, recuerda que la vida es para disfrutarla, así que llévatela leve pero constante con los cambios que decidas hacer y con eso marcarás una diferencia en tu peso.
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