Una flora intestinal sana no sólo es esencial para la salud del sistema digestivo, además, tiene un rol clave para mantenernos sanos y evitar enfermedades. Sin embargo, […]
Una flora intestinal sana no sólo es esencial para la salud del sistema digestivo, además, tiene un rol clave para mantenernos sanos y evitar enfermedades. Sin embargo, el estrés, algunas enfermedades y el consumo de ciertos medicamentos pueden alterarla o desequilibrarla impactando directamente nuestro bienestar.
Una de las funciones más importantes del sistema digestivo es la defensa contra los agentes patógenos y es en el intestino donde reside más del 70% del sistema inmunológico que proteger al cuerpo contra bacterias, virus y otros invasores externos que pueden causar enfermedades. Un intestino sano promueve el desarrollo de las células y anticuerpos que actúan como una barrera protectora contra los microorganismos no deseados.
Los probióticos, según los define la Organización Mundial de la Salud (OMS), son «microorganismos vivos que cuando se administran en cantidades adecuadas ejercen efectos saludables en el huésped». Los MEJORES PROBOTIOCOS SON LOS NATURALES, principalmente
1. Yogurt griego
2. Kefir
3. Chucrut
4. Chocolate negro
5. Microalgas
6. Sopa de miso
7. Pepinos encurtidos (pickles)
8. Vinagre de manzana organico.
En su libro «La Dieta Ecológica del Cuerpo», Donna Gates, una pionera en el campo de la nutrición y la salud, se refiere a esta microflora como los alquimistas y seres muy inteligentes que se comunican en todo momento con nuestro sistema nervioso entérico, ubicado en los intestinos y comúnmente se conoce como el segundo cerebro. De hecho, ella sostiene que es este segundo cerebro el que está en última instancia controlando el cerebro primario en la cabeza (obsérvate si te sientes de mal humor analiza lo que haz comido y como esta tu digestión).
Sé Naturista!