¡Sin necesidad de mucho espacio ni equipo!
Un entrenamiento High-Intensity Interval Training, mejor conocido como HIIT, es un método de ejercicio caracterizado porque alterna periodos cortos de alta intensidad con periodos de descanso o baja intensidad. Es una técnica ideal para hacer en casa porque no requiere de equipo y es eficiente para quemar calorías, además de mejorar la condición física en poco tiempo.
Cuando hacemos HIIT, la idea es elevar rápidamente la frecuencia cardíaca y mantenerla alta durante el entrenamiento. Esto promueve la quema de calorías y mejora tanto la resistencia cardiovascular como la fuerza muscular.
Así, entre los ejercicios básicos de HIIT tenemos, entre otros, los burpees, una combinación de sentadillas, flexiones y saltos; los saltos de tijera, un salto con las piernas extendidas, o los mountain climbers, donde se simula el movimiento de correr en el lugar, pero en posición de plancha.
5 ejercicios poderosos para un core súper marcado
Los ejercicios HIIT no requieren equipo especializado, ya que muchos de ellos pueden realizarse solo con el peso corporal. Esto los convierte en una opción perfecta para entrenar en casa sin necesidad de equipamiento adicional.
Además, son cortos pero intensos, generalmente de 15 a 30 minutos. Esta característica los hace ideales para personas con horarios ocupados que buscan maximizar su tiempo de entrenamiento.
Por último, otra ventaja es que puedes ajustar la intensidad y la duración de los intervalos según tu nivel de condición física y tus objetivos personales, lo cual los hace adecuados para cualquier persona interesada en mejorar su forma física.
Así que anímate y dale la oportunidad a esta rutina de 15 minutos perfecta para ti.
1. Comienza a calentar tu cuerpo corriendo en tu lugar o haciendo saltos suaves durante 2 minutos.
2. Para el circuito principal, que durará 12 minutos, realiza estos ejercicios durante 45 segundos, descansando 15 segundos entre cada uno. Completa el circuito, descansa y repítelo.
3. Para finalizar, realiza estiramientos suaves, enfocándote en los músculos que has trabajado durante la rutina.