Esto es lo que no debes hacer para mantenerla bien.
El cuerpo humano está lleno de hongos, virus, bacterias y otros organismos que en conjunto se conocen como microbioma. Se encuentran principalmente en tejidos y fluidos corporales, y algunos de ellos realizan tareas útiles para nosotros, por ejemplo, la microbioma vaginal o microbioma v, puede desempeñar un papel en la reducción del riesgo de infecciones de transmisión sexual (ITS) y parto prematuro.
Aunque es parte importante de nuestro organismo, aún se sabe poco de ella, excepto que si se desbalancea, inmediatamente lo notamos, pues suele tener como resultado las comunes infecciones vaginales.
De hecho, podría decirse que la microbioma v es casi como un organismo vivo y cambia constantemente cuando menstruas, antes, durante y después de la menopausia, durante el embarazo y durante las relaciones sexuales.
Las señales de que la microbioma vaginal no está bien
Así, este conjunto de organismos puede decir mucho de tu salud y los síntomas que refleja cuando algo no va bien son fuertes y claros, además de que probablemente los conoces ya, si eres una mujer adulta: comezón, olor fuerte, irritación y flujo.
Estos síntomas suelen ser índice de que la microbioma vaginal ha sido modificada y aunque las razones pueden ser varias (como menstruar, porque la sangre propicia más las bacterias), si sientes que algo no es normal, lo mejor es visitar a tu doctor.
Tener infecciones agudas o recurrentes es una señal de que tu microbioma no funciona correctamente. Si esto te es familiar, tómalo como una señal para acudir con tu médico.
Por lo general, tu microbioma se mantiene a sí misma y no necesita de factores externos para estar bien. Es decir, no requiere de productos especiales de limpieza. Basta con que limpies tus labios, tu vulva y la entrada de tu vagina con un jabón neutro, sin aroma, sin introducir nada.
Si bien usar ropa de algodón o tampones y toallas sanitarias sin perfume es recomendado, no hay literatura sólida que sugiera que esas intervenciones hagan una diferencia. Lo que sí está comprobado es que las duchas vaginales son el único comportamiento de “higiene femenina” asociado significativamente con la vaginosis bacteriana.
Como en muchos otros aspectos de nuestra salud, una dieta equilibrada con proteínas, cereales integrales, frutas y verduras, y limitar el consumo de azúcar también será beneficioso para tu microbioma v, pues los niveles elevados de glucosa pueden afectarla, así como los antibióticos también pueden alterarla y aumentar el riesgo de sufrir afecciones como infecciones por hongos.
¿Qué son y cómo prevenir las infecciones urinarias?
