Tener una hermana mayor implica toda una odisea y al mismo tiempo puede resultar sumamente divertido. Seguramente sólo tu entenderás estas 10 cosas: Estás acostumbrada a ser conocida como «la […]
Tener una hermana mayor implica toda una odisea y al mismo tiempo puede resultar sumamente divertido. Seguramente sólo tu entenderás estas 10 cosas:
- Estás acostumbrada a ser conocida como «la hermanita de:»
Por tus futuros maestros, los amigos de la familia, los jefes de tu hermana, o bueno, por todos los que la conocieron primero.
2. Sabes lo difícil que es compartir habitación
Sabes lo que significa «la guerra por la luz», o por el espacio, los horarios, el ruido o hasta el perfume que te acabas de poner y ella odia.
3. Tienes una consejera personal a domicilio
Sí, ella estuvo en medio de la noche platicando contigo de cama a cama, dándote los mejores consejos, riéndote de tonterías y hasta consolándote cuando llorabas histéricamente por que te rompieron el corazón. (Lo cual nunca olvidarás)
4. Siempre tuviste el control #2 en los videojuegos.
O eras Luigi en lugar de Mario.
5. Preparó a tus papás para ti
Lo más difícil le tocó a ella: los permisos para salir, los berrinches cuando eran niñas, las enfermedades (se ponían como locos cuando ella se enfermaba y a ti ya ni te pelaban) y logró extender para ti la hora permitida de llegada. ¡Sí!
6. Tuviste siempre a alguien a quién admirar
Tal vez nunca quisimos admitirlo, pero siempre la admiramos y aprendimos profundamente de ella. Se convirtió en nuestro modelo a seguir.
7. Te hizo más fuerte para afontar la vida
Todas sus burlas, regaños y caras nos ayudaron para ser más fuertes y a estar listas para lo que nos esperaba allá afuera.
8. Esperó a que crecieras para que pudieran irse al antro juntas
Fue la primera en convencerte en que salir de fiesta era una excelente idea. Y se emocionó cuando pudieron salir juntas.
9. Te enseñó cómo arreglarte para verte genial
O no. Tal vez tu terminaste ayudándole a ella a peinarse para sus citas.
11. Tu clóset automáticamente se duplica
El «no tengo qué ponerme» o «esta blusa ya me la vieron» se puede solucionar con el clóset de tu hermana.
10. Nadie tiene una foto más horrible con la que te molestará el resto de tu vida.
Si hay una foto que quisieras que no existiera, sí la tiene ella. Y cómo le encanta reírse de ti.
No importa todas las diferencias que haya entre ustedes, siempre existirá un lazo inigualable que las mantendrá unidas. Nadie te vio crecer más de cerca, ni conocerá tus secretos más ocultos. Y querrás ser su hermana siempre.
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