Su partida duele tanto como cualquier otra. Aquí una pequeña ayuda para tu proceso de duelo.
La muerte de una mascota es un proceso muy doloroso y muchas veces incomprendido. No es fácil darle la despedida a nuestros fieles compañeros y la ausencia que dejan tras de sí es tan notoria que hace que el proceso sea aún más arduo. Si estás pasando por una situación similar, entonces este artículo es para ti. Aquí te doy 5 consejos desde mi experiencia propia que ayudan a lidiar con la muerte de una mascota y superar el duelo.
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5 consejos para lidiar con la muerte de una mascota y superar el duelo
1. Reflexiona en las cosas tan bellas que te enseñó
Algo maravilloso de todas las mascotas es que aún sin hablar, una vez que llegan con nosotros nos enseñan una infinitud de cosas sobre la vida. Muchas veces no nos damos cuenta, pero cuando menos lo esperamos, nuestra vida rutinaria da un giro de 180° y nada vuelve a ser lo mismo. Piensa en las cosas que tu mascotita te enseñó al llegar a tu vida, reflexiona en la manera en que aprendiste a disfrutar más las pequeñas cosas y siéntete feliz de haber podido gozar de esa presencia tan pura y tan bonita.
Como con todo ser vivo, la mejor manera de mantener viva su memoria es aplicando sus enseñanzas aún si su presencia física ya no nos acompaña. No te olvides de todo lo que tu mascota te enseñó y aplícalas en tu vida día con día.
2. Escríbele una cartita de agradecimiento y despedida
Escribir es terapéutico. Escoge un papel bonito y escríbele una cartita en la que le agradezcas todas las cosas buenas que trajo a tu vida, todo cuanto te enseñó y todos los momentos tan bonitos que pasaron juntos. Probablemente lo más doloroso de la muerte es que al ser tan inesperada, no nos da la oportunidad de despedirnos como quisiéramos. Por eso, este también es un buen momento para despedirte de tu mascotita y expresarle todo lo que te gustaría.
Grandes poetas de la literatura española han sentido también esta necesidad de despedirse de sus peludos amigos por medio de la escritura. Los poemas que les han hecho son magníficos. Aquí te dejo un par de ellos por si quieres leerlos: Un perro ha muerto de Pablo Neruda y Elegía en la muerte de un perro de Miguel de Unamuno.
3. Hazle una pequeña ceremonia
Las ceremonias funerarias son actos simbólicos que sirven para honrar la figura del ser querido que ha fallecido y brindar la oportunidad de despedirse de todos aquellos que lo llegaron a querer. Así pues, las ceremonias no están restringidas a la especie humana. Organiza una pequeña ceremonia para tu mascota en el patio de tu casa, alrededor de la macetita en donde le enterrarás, como sea, pero date ese tiempo y espacio para dedicar todos tus pensamientos y emociones a tu peludo compañerito. Invita sólo a personas en quienes de verdad confíes que sepas que respetarán tu duelo y que te acompañarán en tu dolor. Si no puedes pensar en nadie para que te acompañe, entonces mejor haz una ceremonia tu solita donde sepas que tus sentimientos están a salvo.
4. Haz un álbum con sus mejores momentos
Tras la muerte de una mascotita es muy común revisar el celular y ver la extensísima galería de fotos y videos que les tomamos en vida. Mi recomendación es que mientras repasas estos bellos recuerdos, hagas un álbum (ya sea físico o digital) donde reúnas tus momentos favoritos. La sola actividad te ayudará a sentirte un poquito mejor y seguro que más de una vez te cacharás sonriendo.
5. Permítete llorar
Por último quise poner este punto por lo siguiente. Si bien nadie te cuestionaría si te encuentran llorando luego de la muerte de algún ser querido humano, es probable que no falte quien te pregunte que por qué lloras si tan sólo es un animal. Mi recomendación es que hagas oídos sordos. Dejando de lado la total falta de empatía, no le debes explicaciones a nadie acerca de tus sentimientos. Tú y nadie más que tú entiende el dolor que puedas estar experimentando. Ni siquiera alguien que también haya sufrido la pérdida de una mascota podrá comprenderte del todo pues cada vínculo que entablamos con nuestro compañeros es único y sólo comprensible para quien lo vivió.
En ese sentido, valora tus sentimientos. Todo lo que sientas es válido. A fin de cuentas es tu propio proceso de duelo. Así que si de pronto el dolor te hace llorar, permítete hacerlo. No hay por qué avergonzarse. No será así siempre, poco a poquito el dolor irá amainando y al final lo que quedará será tan sólo los bellos recuerdos que traerás a tu memoria con alegría.
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Espero que estos consejos te sirvan para lidiar con la muerte de una mascota y superar el duelo. Recuerda que al final aunque sus presencias físicas ya no estén más con nosotras, siempre los llevaremos en nuestros corazones.
