Carboxiterapia: el tratamiento que sirve para perder grasa La carboxiterapia ha resultado ser muy efectiva para perder centímetros de grasa y líquidos. Conoce los detalles para ver si […]
Carboxiterapia: el tratamiento que sirve para perder grasa
La carboxiterapia ha resultado ser muy efectiva para perder centímetros de grasa y líquidos. Conoce los detalles para ver si este tratamiento es para ti.
La carboxiterapia es un procedimiento que se creó en 1930 en la estación de aguas termales de Royat, Francia para tratar la mala circulación en cualquier parte del cuerpo. Consiste en la aplicación de bióxido de carbono (CO2) en las capas superficiales de la piel por medio de una aguja parecida a las de insulina. Al ingresar, el gas rompe el tejido, lo que estimula la micro circulación y el drenaje linfático, además de que activa el proceso de destrucción de grasa. Actualmente se ha popularizado su uso para efectos estéticos.
Carboxiterapia: el tratamiento que sirve para perder grasa
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¿Cuáles son sus beneficios?
Las bondades de este tratamiento son muchas, ya que reduce medidas en zonas específicas, elimina los depósitos de grasa, borra la celulitis e incluso, reestructura el tono de la piel del rostro y del cuello. También es recomendable después de haberse practicado una liposucción o lipoescultura.
La carboxiterapia estimula la lipólisis de forma directa en el área que se coloca subcutáneamente, y al mismo tiempo actúa mejorando los factores que intervienen en las síntesis de colágeno y elastina, reduciendo esas acumulaciones de grasa localizada, como los gorditos que nos marca el brassiere en la espalda, los de la parte interior de los muslos o cualquier zona específica que quieras adelgazar de una vez por todas.
¿En qué consiste el procedimiento?
A través de una aguja muy delgada se van dando piquetitos en las diversas zonas que queremos reducir o aquellas afectadas por la celulitis: piernas, abdomen, espalda y brazos. En cada piquete se introduce el CO2, por lo que dejan la aguja algunos segundos dentro. El gas actúa, y en algunos minutos se comienzan a sentir sus efectos.
¿Duele la aplicación?
No, pero sí llegamos a sentir picazón o una ligera molestia con los piquetes. La zona más sensible es la parte posterior de los muslos, en donde mientras están inyectando el gas se siente un ardor tolerable. En el resto del cuerpo realmente es casi imperceptible.
¿Cada cuándo debemos someternos al tratamiento para que surta efecto?
Lo ideal es poder efectuar dos sesiones por semana con una duración de 30 minutos cada una, procurando dejar pasar dos o tres días entre sesiones para que el cuerpo recupere su equilibrio.
Los resultados deben empezar a notarse alrededor de la cuarta sesión, mostrando ya una mejoría importante después de las 10 sesiones. Entre las mejoras que presentaremos, está la calidad del tejido pues la piel se vuelve más lisa y las zonas afectadas se adelgazan. También empieza a haber ya una reducción de medidas en las partes en donde se aplican las inyecciones.
¿Hay riesgos o efectos secundarios?
Este procedimiento puede causar una leve molestia al momento de la aplicación del gas. En algunos casos los pacientes experimentan una sensación de mareo leve y transitorio, o un ligero enrojecimiento de la zona tratada que desaparece prácticamente de inmediato. En ese sentido, es importante tomar en cuenta el nivel de sensibilidad de cada persona y sería conveniente hacer una prueba antes de que pagues el tratamiento completo.
A modo general, la carboxiterapia no tiene efectos colaterales importantes, salvo los descritos, y está recomendado para mujeres de cualquier edad. Como cualquier tratamiento, lo principal es acudir a un establecimiento serio que cumpla con todas las normas de higiene y que esté certificado por organismos de salud y dermatología, para asegurarnos de la calidad del gas y del equipo, así como la experiencia de quien aplicará las inyecciones.
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Someterse a cuatro o más sesiones de carboxiterapia tiene como resultado una reducción de medidas y de tejido adiposo de entre 2 y 6 cm, dependiendo de cada organismo. ¿La has probado? ¡Cuéntanos cómo te resultó!
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