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10 malos hábitos que drenan tu energía todos los días

Por: Mujer de 10 27 de Enero
10 malos hábitos que drenan tu energía todos los días
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Si queremos que las cosas sucedan, necesitamos empezar a deshacernos de hábitos que drenen nuestra energía y que, sin darnos cuenta, terminan disminuyendo nuestros niveles de felicidad y satisfacción. Por Co-Madre

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10 malos hábitos que drenan tu energía

Aquí te dejamos 10 hábitos a los que deberías renunciar hoy mismo para incrementar de manera dramática tu energía y tu motivación, lo que te llevará a tener un estilo de vida mucho más productivo y pleno, en todos aspectos.

1 Preocuparte por lo que no puedes controlar

Si algo nos ha quedado claro en estos meses es que hay muchísimas cosas que no podemos controlar y que están fuera de nuestras manos y la verdad es que el preocuparnos por todo esto, no hará más que aumentar la ansiedad que la incertidumbre ya que genera. Piensa que no hagas ganas preocupándote, analiza lo que si puedes cambiar y hazlo.

2 Querer que TODO sea perfecto

Habrá ocasiones en las que la perfección importe, pero no serán la mayoría. No te obsesiones con la perfección, porque llevar algo del 95 por ciento al 100 por ciento puede quitarte tanto tiempo y energía como llevarlo del 1 al 95 por ciento. Elige tus batallas.

3  Dejarte consumir por lo que les preocupa a otros

Siempre habrá gente hablando o quejándose por algo. Si ese algo no influye en tu vida de manera directa, pero te enganchas sólo porque los demás lo hacen, terminarás exhausta. No permitas algo que no es tuyo consuma tus energías. Rodéate de personas que te impulsen, no que te roben energía.

4 Ayudar a personas que no quieren ser ayudadas

Puede que alguien a quien quieras esté pasando por un momento difícil. Apoyarlos en la medida de tus posibilidades es importante. Una vez dicho esto, es importante señalar que no puedes cambiar a la gente. El cambio tiene que surgir de su interior, recuerda que hay cosas que no puedes controlar y que según el Budismo, el intentar cambiar a la gente es causa de sufrimiento.

5 Invertir mucho tiempo leyendo entre líneas

Las palabras y acciones de los demás pueden desalentarnos. En algunos casos, esas palabras y acciones pueden enseñarnos cosas sobre nosotras mismos que vale la pena saber. Pero en la mayoría de los casos, nos clavamos demasiado con eso. No te preocupes por el tono del mensaje de texto que te mandó una clienta o por la pequeña interacción que tuviste con un mesero el otro día. Puede ser que sólo tuvieran prisa o que estuvieran teniendo un mal día. No, te tomes las cosas demasiado personal.

6 Pasar tiempo con gente que te desmotivan

Rodéate de personas que te levanten, gente que te acepte por lo que eres y te impulse a ser mejor, a dar un paso más, y que también te abrace cuando lo necesites.

7 Hacer un trabajo que no disfrutas

Es inevitable tener trabajos que no nos gustan, de manera ocasional. Incluso es normal tener que hacer actividades que no nos encantan. Pero esto no debe consumir la mayor parte de tu tiempo. Pasar 8 horas diarias haciendo algo que te cansa sin darte nada a cambio es sumamente agotador. Valora donde estás y si te da más de lo que te quita.

8 Olvidar el ejercicio

Es muy fácil apretar el botón de snooze en tu alarma o echarle la culpa a la pandemia y los gimnasios cerrados, pero todas sabemos que cuando se quiere, se puede, y hacer algo de ejercicio, aunque sean 10 minutos o una caminata alrededor de tu cuadra, hace maravillas por nuestro bienestar. El ejercicio libera endorfinas, te da tiempo para relajarte y te hace sentir más saludable.

9 Obsesionarte con el pasado

Esto es muy humano, pero no sirve de gran cosa. Es similar a preocuparte por cosas que están fuera de tu control, pensar en el pasado no te lleva a ningún lado. Sólo te quita la motivación que tienes en el presente y no te deja progresar. Lo único que puedes hacer en este momento es seguir avanzando.

10 No saber decir que no

Todas sentimos esta abrumadora necesidad de complacer a los demás. Por eso es tan difícil decir que no. Esto puede ser bueno en ocasiones, como cuando nos obliga a salir de nuestra zona de confort. Sin embargo, la mayor parte del tiempo juega en nuestra contra porque terminamos asumiendo demasiadas responsabilidades o haciendo demasiadas cosas que no queremos hacer.

La solución es aprender a decir que no. La transición es difícil al principio, pero la gente empezará a respetarte por esto. Además, te dará mucho más tiempo y poder para comprometerte con otras cosas que sí quieras hacer. ¿Qué otro hábito crees que debes dejar atrás para vivir más plena este 2021?

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