10 falsos mitos sobre el feminismo moderno

Queremos desmentir los 10 mitos sobre el feminismo moderno más comunes, para dejar a un lado la falta de información y las creencias antiguas. ¿Cuántos de estos pensabas que eran verdad?

Mito no. 1

Las feministas odian a los hombres.

Este mito sobre el feminismo moderno es uno de los más comunes. Se cree que las feministas odian a los hombres por tener más poder dentro de la sociedad y lo que ellas quieren es derrocarlos. Sin embargo, una verdadera feminista no busca quitarle los privilegios a los hombres, si no tener los mismos derechos y las misma oportunidades dentro de la sociedad.

Mito no. 2

Solo las mujeres son feministas.

Esto no puede ser más falso. Hay hombres que simpatizan con la equidad de género y apoyan las campañas feministas. Esto lo hacen no porque quieran ser los héroes de las mujeres sino porque saben que si no hay igualdad de circunstancias, tanto para el hombre como para la mujer, el mundo no cambiará y seguiremos cometiendo los mismos errores. Un ejemplo de ello son los artistas que apoyan la campaña #HeForShe en la que Emma Watson es vocera.

Mito no. 3

Las mujeres feministas no quieren tener hijos.

Esta idea surge al ver que muchas feministas no tienen una familia ni aceptan los roles tradicionales de la mujer, que es ser ama de casa y dedicarse a los hijos. Pero esto no ocurre con todas las feministas. De hecho, hay muchas que tienen hijos e hijas. Lo que sucede en realidad es que las mujeres luchan por el derecho a decidir sobre su cuerpo y elegir cuándo y cómo tener hijos. Aunque también son libres de elegir no tenerlos.

Mito no. 4

Las mujeres feministas no son femeninas y no se preocupan por su apariencia.

Este mito sobre el feminismo moderno también está muy arraigado, pero lo cierto es que las feministas quieren acabar con los estereotipos sobre la feminidad que impone la publicidad y la moda en los que la mujer es un objeto sexual y tiene que cumplir con los estándares de un cuerpo delgado y atlético. Para una feminista, ser femenina implica amar tu cuerpo y tu apariencia de forma libre bajo tus propios códigos.

Mito no. 5

La mayoría de las feministas son homosexuales.

No hay nada más alejado de la realidad que esta afirmación. Si bien, muchas mujeres homosexuales están a favor de la lucha feminista, no quiere decir que todas las mujeres lo sean. Ser feminista y luchar por la equidad no tiene nada que ver con tu preferencia sexual. Así que cuando alguien te diga esto, hazle saber que no está en lo correcto.

Mito no. 6

Las feministas son unas histéricas.

Este mito sobre el feminismo acerca de que las feministas son unas locas, “feminazis” y amargadas se ha generado a partir de que las mujeres comenzaron a alzar su voz ante las injusticias, cosa que no era costumbre. Pero decir lo que piensas y luchar por lo que crees no te hace una histérica, es más bien una intensa pasión por querer cambiar las cosas. Sólo recuerda que no todos los comentarios son un ataque a las mujeres ni a tus ideales.

Mito no. 7

A las feministas les ofende la caballerosidad en una cita. 

Se piensa que a las mujeres feministas les disgusta que en una cita, un hombre les abra la puerta del auto, pague la cena o las lleve a su casa. Esto no es verdad, a nadie le molesta que se le trate con amabilidad y muestren interés. Además, siempre podemos invitar nosotras en la próxima salida.

Mito no. 8

Las feministas buscan ser iguales a los hombres.

Muchas veces, el feminismo es reducido a esta idea. Sin embargo, es mentira. El feminismo no busca que las mujeres sean iguales a los hombres –porque es un hecho que ni siquiera biológicamente lo somos–, lo que se desea es que existan las mismas oportunidades y los mismos derechos. También que se tenga la libertad de decidir sobre el propio cuerpo, sin que haya ideas preconcebidas sobre lo que una mujer tiene que ser y hacer.

Mito no. 9

El feminismo presenta a la mujer como una víctima.

Esta idea es incorrecta, pues el feminismo moderno busca que la mujer tenga plena libertad de acción en su vida y participe de manera equitativa en la sociedad. Esa ideología implica luchar en contra de los abusos a las mujeres, pero no quiere decir que se crea que toda mujer es una víctima.

Mito no. 10

En el siglo XXI ya no sirve para nada el feminismo.

¡Mentira! Ahora más que nunca se necesita. En el mundo todavía hay mucha represión e imposición a la mujer y aún no se consigue plenamente la igualdad de derechos en la sociedad. Esto se consigue en el día a día y apoyándonos entre nosotras.

Ahora que ya sabes los mitos más comunes sobre el feminismo, elimínalos y di con orgullo: SOY FEMINISTA.