¿Te has preguntado a ti misma si cumples tus promesas o las que realizas a los demás? ¿Has meditado sobre cómo el no cumplirlas afecta la manera en […]
¿Te has preguntado a ti misma si cumples tus promesas o las que realizas a los demás? ¿Has meditado sobre cómo el no cumplirlas afecta la manera en la cuál te observan y perciben? Te comparto algunas ideas acerca de este importante tema sobre realizar o cumplir promesas, y de que manera apoyan tu nivel de impecabilidad.
Las palabras y promesas tienen un alto grado de importancia ya que corresponden al valor que tienes a través de lo que dices y cumples. Si cumples tus promesas demuestra a los demás quién eres. Por medio de las promesas que realizas te haces presente e impactas en el mundo, demuestras ante los demás el valor que le das a tus palabras y acciones, teniendo la oportunidad de ser coherente y beneficia tu autoestima.
Las promesas que realizas, aportan o afectan de manera directa e inmediata tu identidad ante los demás y por supuesto a ti misma. Al no cumplir una promesa, tu credibilidad es cuestionada y genera no sólo desconfianza sino también desencanto en los demás. Al prometer algo, la otra persona espera un resultado, una acción y si no se realiza tiene de igual manera una o varias consecuencias.
Cuando se realiza una promesa o cuando se acepta una petición, revisa tus posibilidades de acción, tiempos disponibles, herramientas, habilidades y expectativas de quién te pide algo. Estos puntos son básicos para entonces comprometerte y lograr un acuerdo, verifica también que lo que se pide y lo que se espera para que sea claro para ambas partes.
Pregúntate y revisa de igual manera los siguientes puntos:
- ¿Deseas realizar lo que se te pide y puedes hacerlo en los tiempos acordados?
- ¿Cuál es tu intención u objetivo detrás de la promesa o bien de la petición del otro?
- ¿Para qué realizas una promesa, una oferta?, ¿qué deseas lograr específicamente?
- ¿De qué manera beneficia el cumplimiento de la promesa?
- Al escuchar la petición ¿cuál es la expectativa e interés del otro?
- Al ofrecer una promesa ¿cómo recibe el otro tu promesa?
- Revisa si tienes las herramientas, recursos, capacidad, habilidades, tiempos a favor para poder comprometerte.
- ¿Qué nivel de negociación existe?
- Considera los factores posibles que puedan afectar tu promesa.
- Asume las consecuencias y arreglos al no cumplir la promesa.
- Reconócete a ti misma cuando cumplas con la promesa.
- Escucha y observa al otro al recibir la promesa ¿qué le pasa?, ¿cumple con sus expectativas?
- ¿Cómo beneficia o fortalece la relación con el otro?
Cada vez que cumples tus promesas te reafirmas como una persona responsable, de confianza y asertiva, así que, ¡no prometas lo que no puedes cumplir!
Joseph Estavillo es psicoterapeuta Humanista-Gestalt y Coach. Tiene especialidad en terapia de pareja, sexualidad y certificación en Coaching Ontológico Multidimensional. Puedes escribirle a jhestavillo@gmail.com
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