Si sientes que subes de peso durante tu periodo, esto te interesa.
¿Subimos de peso durante nuestro ciclo menstrual? El vientre inflamado es uno de los síntomas más comunes e incómodos que atravesamos mientras estamos menstruando, además de que también puede reflejarse en la báscula. Además, estar inflamada por varios días seguidos nunca es cómodo, así que nos dimos a la tarea de averiguar cómo evitar el vientre inflamado durante tu periodo.
Aquí te compartimos todo lo que encontramos que podría contribuir a la incomodidad y lo que puedes hacer para eliminar la hinchazón de tu vientre bajo.
¿Por qué subimos de peso durante nuestro ciclo menstrual?
Si bien es cierto que la báscula puede marcar gramos de más, en realidad no se trata de una subida de peso real, pues una vez que la hinchazón disminuye, lo más probable es que el peso vuelva a la normalidad.
Esto se debe a las fluctuaciones hormonales que atravesamos justo unos días antes de nuestro periodo, donde los niveles de estrógeno son más altos, por lo cual nuestros cuerpos tienden a retener agua.
Además, también la progesterona, que tiene una subida en la segunda mitad del ciclo menstrual (justo antes de tu período), puede hacer que el tracto digestivo sea más lento, por lo que también abona a los síntomas de hinchazón o saciedad.
De acuerdo con información de la Clínica Mayo, la inflamación suele comenzar uno o dos días antes del inicio del período menstrual, pero algunas mujeres experimentan síntomas hasta cinco días antes. La buena noticia es que suele desaparecer una vez que hayas menstruado durante unos días.
3 formas caseras de combatir el vientre inflamado cuando estás en tus días
Diuréticos naturales
Procura comer alimentos que actúan como diuréticos naturales: el apio, los pepinos, la sandía, el jugo de limón, el ajo y el jengibre, te harán sentir más liviana, sobre todo durante tu periodo.
Consume más potasio y proteína
Incluye en tus comidas ingredientes que no te hagan hincharte y estos son alimentos ricos en potasio, como plátanos, melón, tomates y espárragos, que ayudan a promover un buen equilibrio de líquidos. Las grasas saludables, como la chía, las nueces y el salmón, también son perfectas para esos días. Las proteínas son otra apuesta segura y el pollo, el pescado o el tofu serán tus mejores aliados.
Dale una pausa a la cafeína y al alcohol
Cuando estamos premenstruales, el alcohol puede aumentar los síntomas, como sensibilidad en los senos, cambios de humor e hinchazón, mientras que el café puede sobreestimular el tracto digestivo e irritar los intestinos, además de deshidratarte, lo que provoca retención de líquidos.
Además de estos tres cambios simples en tu alimentación, procura bajarle a la sal, hidratarte bien con agua simple, hacer ejercicio aeróbico ligero y procurar dormir tus ocho horas esos días.