Descubre qué significan tus flujos vaginales. Te compartimos algunos consejos para mantener una buena salud íntima.
Sí, lo sabemos, hablar de flujos vaginales puede parecer un tema tabú y a muchas mujeres le da pena, sin embargo, es de lo más normal, así como es normal tener dudas al respecto.
Debes saber que los flujos vaginales son comunes en la vida de todas las mujeres. Sin embargo, a veces pueden indicar ciertos cambios en la salud íntima.
En esta nota de Mujer de 10 te vamos a hablar sobre los tipos de flujos vaginales, cuáles son normales y cuándo debes prestar atención a posibles señales de alerta.
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Flujos vaginales normales
Flujo Blanco o Transparente: El flujo vaginal más común es de color blanco o transparente, y es completamente normal. Este tipo de flujo es una señal de que tu cuerpo está haciendo su trabajo para mantener la vagina limpia y saludable.
Flujo clara de Huevo: Durante la ovulación, es posible que notes un flujo vaginal similar a la clara de huevo cruda. Esto indica que estás en tu período más fértil.
Flujo Amarillo o Amarillo-Verdoso: En ocasiones, un ligero tinte amarillo o amarillo-verdoso es normal. Esto puede deberse a pequeñas cantidades de sangre menstrual que se mezclan con el flujo.
Flujo Inodoro o Ligeramente Dulce: El flujo vaginal saludable generalmente no tiene un olor fuerte. Puede tener un ligero aroma dulce o terroso, pero no debe ser desagradable.
Flujos vaginales anormales
Flujo Gris, Verde o Amarillo con Olor Desagradable: Un flujo con estos colores y un olor fuerte puede ser un signo de infección, como la vaginosis bacteriana o una infección por hongos.
Flujo espeso y blanco, como Requesón: Esto podría ser un signo de una infección por hongos, especialmente si se acompaña de picazón o ardor.
Flujo rosado o con sangre: Si no estás en tu período y ves sangre en tu flujo, podría indicar problemas como pólipos cervicales, infecciones o incluso signos tempranos de cáncer cervical.
Flujo excesivo o cambio repentino en la cantidad: Un aumento repentino en la cantidad de flujo, especialmente si se vuelve acuoso, podría ser un signo de una infección o un trastorno hormonal.
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¿Cuándo es necesario ir al ginecólogo?
Si notas un cambio significativo en tus flujos vaginales o experimentas síntomas como picazón, ardor, dolor abdominal o en la parte baja de la espalda, o un olor fuerte y desagradable, es importante consultar a un profesional de la salud.
Estos síntomas podrían indicar una infección o un problema de salud subyacente que requiere atención médica.
Tips para mantener flujos normales y saludables:
- Limpieza adecuada: Lava la zona íntima con agua tibia y evita el uso de jabones perfumados, duchas vaginales o productos químicos irritantes.
- Ropa interior de algodón: Usa ropa interior de algodón que permita que la zona respire.
- Hidratación y nutrición: Bebe suficiente agua y come una dieta equilibrada para mantener una salud óptima.
- Usa protección durante las relaciones sexuales: El uso de condones puede ayudar a prevenir infecciones de transmisión sexual y posibles irritaciones.
- Visita a frecuentemente al ginecólogo: Programa exámenes ginecológicos regulares para monitorear tu salud vaginal y detectar cualquier problema a tiempo.
Ahora ya sabes la importancia de entender tus flujos vaginales. No dudes en hablar con un profesional de la salud si tienes alguna preocupación o notas cambios significativos en tus flujos.
Tu salud siempre será lo más importante, por eso es vital estar atenta a las señales que tu cuerpo te envía.
