Cada vez que viajamos a un lugar deberíamos seguir ciertas normas para cuidarlo y respetarlo, en todos sentidos. Pero en el turismo sostenible hacer esto es aún más importante, ya que de no hacerlo dañamos el equilibrio natural del destino. Mira qué sí y qué no hacer en un viaje de turismo sostenible.
El turismo sostenible tiene como objetivo principal preservar el medio ambiente del destino, manteniendo el equilibrio natural, ecológico y social, reduciendo el impacto de la actividad turística al mínimo. Seguro has estado en destinos que han sido casi invadidos por grandes cadenas hoteleras que han construido edificios enormes que rompen con el paisaje y que no son nada respetuosos para el medio ambiente. Esto precisamente es lo que se quiere erradicar con este tipo de turismo.
Pero estos viajes no sólo tienen como intención no afectar al medio ambiente -aunque es la parte medular de su promesa-, también tienen que ver con darle el mayor apoyo que podamos a las comunidades locales, aprender de ellas y vivir una experiencia inolvidable. Esto impacta de modo favorable no solo en la ecología, sino en la economía.
Foto: Healthy Travel Blog
Descubre qué sí y qué no hacer en un viaje de turismo sostenible:
SÍ
-Busca alojamientos y establecimientos que respeten el medio ambiente y los derechos humanos. Fíjate que garanticen su cumplimiento con sellos de calidad.
-Cuando llegues a tu lugar de destino y durante toda tu estancia, intenta no malgastar los recursos naturales, como el agua o la energía, y respeta las reglas del sitio en cuanto a desecho de basura y residuos.
-Consume local y contribuye con la realización y la compra de artesanías o productos locales, para apoyar a las comunidades. Esto incluye también a los restaurantes, aléjate de las grandes cadenas y contribuye a la economía local.
-En el caso de visitar zonas protegidas, como arrecifes o parques naturales, sigue las instrucciones del lugar y evita a toda costa dañarlo.
NO
-Te lleves recuerdos del ecosistema –cero conchitas, troncos, piedras y mucho menos fauna y flora-, ya que puedes causar un gran daño.
-Interactúes con los animales del lugar. Por favor, no te tomes fotos con ellos, ni los molestes –eso incluye a los animales en cautiverio que sirven como amenidad turística-. Recuerda todas las historias de animalitos muertos por turistas idiotas queriendo tomarse selfies con ellos o emborracharlos.
-Compres souvenirs o productos elaborados a partir de especies de plantas o animales silvestres y mucho menos en peligro de extinción.
-Tires basura, más que en los lugares indicados. Recuerda que si dejas residuos orgánicos en áreas naturales, estas afectando los hábitos de la fauna y flora silvestre.
El turismo sostenible es una de las maneras más respetuosas y conscientes de viajar. Apúnate a esta experiencia.
Con información de Isabel Menéndez para Revista Fernanda julio.
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