Seguramente has escuchado hablar de productos libres de sulfatos y parabenos. Es un gran avance, pero aún hay mucho por hacer. Conoce las doce sustancias peligrosas que tienen […]
Seguramente has escuchado hablar de productos libres de sulfatos y parabenos. Es un gran avance, pero aún hay mucho por hacer. Conoce las doce sustancias peligrosas que tienen tus productos de belleza y evítalas o mídete en su aplicación.
Cada día somos más conscientes de lo que comemos, tomamos y nos untamos, pues sabemos que muchas sustancias y aditivos químicos pueden ser nocivos a la salud. A continuación te presento algunas sustancias peligrosas que tienen tus productos de belleza para que procures evitarlas.
Palmitato de retinol: Se sintetiza a partir de la vitamina A y es una combinación de retinol y ácido retinoico. Se emplea en cremas de día con factor de protección solar, en cremas anti arrugas y en bálsamos labiales. Estudios han encontrado una posible relación entre el uso de esta sustancia y la formación de tumores cancerígenos cuando la piel es expuesta a los rayos UVA y UVB; en otras palabras, es una sustancia foto carcinogénica. Estudios más recientes realizados por otros centros de investigación niegan esta teoría. Pero, si lees las etiquetas de algunos productos que contienen derivados de la vitamina A, como retinol, ácido retinoico y el palmitato de retinol, encontrarás que alertan sobre evitar la exposición al sol. Como para qué arriesgarse, ¿no? Si vas a usar productos con vitamina A, úsalos de noche o combínalos con un filtro solar que no incluya estas sustancias.
Triclosán: Cada vez surgen más estudios que indican que esta sustancia, empleada en jabones, pastas de dientes, desodorantes y antibacteriales, es tóxico para el hígado, causando fibrosis hepática y cáncer. Y además, su uso es tan cotidiano, que ya se detectan niveles peligrosos en la leche materna y en los mares y ríos. Cuidado, checa que tus productos de higiene no lo contengan.
Formaldehido: Se usa mucho en esmaltes de uñas, cosméticos en general y tintes, y ha resultado ser realmente tóxico y peligroso. Ocasiona dolor de cabeza, mareos, dermatitis, problemas respiratorios y oculares, alergias… en personas sensibles a la sustancia. Aún no hay resultados concluyentes que determinen su relación con el cáncer, pero hay estudios que ya lo vinculan a ciertos tipos de tumores, así que mejor, evítalo.
Pfelendiamina (PPD): Son los colorantes que se utilizan para los tintes de pelo y suelen aparecer en la etiqueta del producto como CI seguido de un código de cinco dígitos. Estos compuestos derivados de alquitranes de carbón son cancerígenos. Son muy peligrosos para el medio ambiente.
Dietanolamina (DEA, MEA o TEA): Estos químicos son utilizados para que los productos sean más espumosos o cremosos. Irritan la piel y los ojos, pueden ser tóxicos para el sistema nervioso e inmunitario y pueden reaccionar con otros ingredientes de los productos de cosmética formando tóxicos cancerígenos.
Siloxanos: Usados en los cosméticos para suavizarlos, ablandarlos y humedecerlos, se sospecha que interfieren con las funciones hormonales y causan toxicidad en el hígado. Búscalos como ciclometicona e ingredientes que terminan en “siloxano” como cyclotetrasiloxano.
Butilhidroxianisol (BHA) y Butilhidroxitolueno(BHT): Son conservadores y antioxidantes que se usan principalmente en maquillajes. El BHA es tóxico para el sistema inmunológico y puede ocasionar cáncer. El BHT puede ser toxico para la piel, los pulmones y el hígado. Estas sustancias pueden causar alergias, interferir en las funciones hormonales y favorecer el crecimiento de los tumores. ¡Cuidado!
Foto: Thinkstock
Tolueno: También llamado metilbenceno, se trata de un compuesto químico que, aspirado, puede provocar somnolencia, dolor de cabeza o, de forma continuada, daños en el sistema nervioso. Organismos como la Agencia Europea de Químicos (ECHA) apuestan por su limitación para evitar riesgos, especialmente cuando el tolueno se encuentra presente en el entorno laboral (como en fábricas o salones de manicure).
Ftalatos: Son compuestos químicos empleados para añadir elasticidad a los plásticos. Están presentes en muchos esmaltes de uñas, perfumes y otros cosméticos. A menudo se han relacionado con problemas de fertilidad y desarrollo en humanos, ya que alteran el funcionamiento hormonal. Además de todo, es un compuesto que no se elimina del medio ambiente fácilmente, por lo que todos los plásticos elaborados con ftlatos que acaban en la basura o en los mares, contaminarán por décadas y décadas. ¡No más!
Parabenos: Fungen como conservadores y están presentes en la gran mayoría de productos cosméticos, ya sean artículos de maquillaje, cremas hidratantes, productos capilares… No se podido comprobar científicamente al 100% que sean perjudiciales para la salud siempre y cuando se usen en concentraciones reducidas, el problema es que su efecto en el cuerpo es acumulativo. Lo que sí es un hecho, es que según estudios del Diario de Toxicología Aplicada en 2004, se detectaron parabenos en ciertos tumores mamarios y pueden producir reacciones alérgicas en personas con piel sensible o que tengan ciertas patologías como dermatitis atópica.
Foto: Gettyimages
Sodio lauril/laureth sulfato (SLS/SLES): Son dos químicos muy conocido y usados por la industria cosmética. El Sodio Lauril Sulfato (SLS) es un agente tensoactivo, detergente y emulsionante presente en casi todos los shampoos, tratamientos del cuero cabelludo, colorantes capilares, agentes blanqueadores, pastas dentales, jabones líquidos, productos de limpieza, maquillaje, detergentes para ropa y aceites o sales de baño. El problema real con SLES/SLS es que el proceso de fabricación (etoxilación) está contaminado con 1.4-dioxano, un carcinógeno (cancerígeno). Los estudios sobre el SLS han demostrado irritación de la piel y los ojos, toxicidad de órganos, toxicidad para el desarrollo y reproducción, neurotoxicidad, alteraciones endocrinas, ecotoxicología y cambios bioquímicos o celulares y posibles mutaciones y cáncer. El SLS también se ha ligado a las nitrosaminas -potentes carcinógenos que hacen que el cuerpo pueda absorber nitratos también cancerígenos-.
Almizcle sintético: Se utiliza en perfumes y fragancias en sustitución del almizcle natural, que proviene de fuentes animales. Está vinculado a trastornos hormonales y se acumula en la leche materna, grasa corporal, sangre del cordón umbilical y en el medio ambiente.
¿Conocías estas sustancias peligrosas que tienen tus productos de belleza? Infórmate, lee las etiquetas y cuídate. Actualmente disten muchas marcas limpias y naturales que limitan o evitan el uso de químicos tóxicos. ¡La belleza no debe perjudicar tu salud!
Con información de www.ewg.org, www.elle.es, www.cancer.gov, ecolisima.com
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