Es increíble el daño que podemos hacerle a la persona que más queremos, sin tener la intención de hacerlo. Tú me enviaste un correo de despedida, […]
Es increíble el daño que podemos hacerle a la persona que más queremos, sin tener la intención de hacerlo.
Tú me enviaste un correo de despedida, ahora me toca a mi, esto es lo que no pude decirte cuando terminamos:
Aunque fui yo quien tomó la decisión de separarnos, quedaron muchas cosas que nunca te dije, tal vez porque no era el momento adecuado y es que no quería que te quedarás con un mal sabor de boca, porque al final no fue falta de amor, simplemente somos dos personas que ya caminábamos en direcciones diferentes.
Tal vez no te diste cuenta pero todos lo detalles y atenciones las dejaste de lado, no sé dónde quedó la emoción de vernos, esas ganas de compartir cada minuto del día juntos, de hacer cosas nuevas… Poco a poco te alejaste, te convertiste en un extraño, maniático del estudio y el trabajo. Varias veces pensé que tenías a alguien más, tal vez no me equivoque, pero eso sólo lo sabrás tú.
Es muy difícil aceptar que lo que se prometió sería para siempre, se fue destruyendo con el paso de los meses… Ese viaje que hicimos juntos fue lo peor que nos pudo haber pasado, maldita mi insistencia en hacerlo… Ya éramos dos extraños, compartimos cama pero parecía que dormía sola, ¿intimidad? Pfff ni hablar de eso… ¿Qué nos pasó?
Festejamos 3 años juntos y no me dejarás mentir, no fue lo mismo… Y de ahí ya sólo faltaba agarrar valor para terminarlo, y tal vez no me creas, pero fue una decisión muy difícil para mi, pero ya no podía seguir así. Dejar de pensar en mi porque los dos estuviéramos bien, ¡jamás!
Y claro, no todo fue malo, siempre agradecerá haberte conocido, y compartir contigo todo ese tiempo. Me hiciste sentir única, amaba tus atenciones, tu caballerosidad que hacía que me enamorará cada vez más de ti, esa manera que tenías de consentirme y jamás decirme NO a nada… Te admiraba demasiado.
Te amé, en verdad y eso fue lo que me hizo alejarme de ti, saber que ya no serías feliz aquí, aunque te niegues a aceptarlo… Gracias por todo, te deseo lo mejor, sé que llegarás muy lejos y que llegará ese amor que tanto anhelas, ella quien será el verdadero amor de tu vida…
Ahora lo sabes, aunque todo lo indique, no te dejé por alguien más… Algún día entenderás que la vida da muchas vueltas y nos trae sorpresas que jamás hubiéramos imaginado.
Te deseo que seas feliz y espero tú hagas lo mismo por mí…
