Por su tamaño pueden parecer insignificantes, pero en realidad las leguminosas son los gigantes de la nutrición. ¡Conócelas a fondo! 2016 es el año en que la […]
Por su tamaño pueden parecer insignificantes, pero en realidad las leguminosas son los gigantes de la nutrición. ¡Conócelas a fondo!
2016 es el año en que la Organización de las Naciones Unidas ha nombrado como año de las leguminosas. ¿Por qué? Por su importante valor nutricional, así como su cualidad sustentable en comparación con otros alimentos.
Son todos los alimentos que crecen en vainas. Entre los más conocidos están el frijol, el garbanzo, las lentejas y los chícharos. Puede parecer que hablamos tan sólo de estos cuatro alimentos, pero en realidad hay cientos de variantes de cada una. En India, por ejemplo, existen lentejas rojas, cafés, verdes, amarillas y de colores. Pero no vayamos tan lejos, los frijoles que podemos encontrar en México van desde el clásico negro hasta el pinto, pasando por el morelos o perú… ¡Todos con un sabor particular!
¿Por qué tanto entusiasmo por estas semillitas? Su valor nutricional es ¡enorme!
En parte, el movimiento #MeatlessMonday nació de la necesidad de hacer conciencia acerca del daño ambiental que causa nuestro consumo de carne, pues no sólo se devastan grandes cantidades de bosques para tierras de pastoreo, sino que requiere muchísima agua para su producción.
Por el contrario, las leguminosas pueden cultivarse en ambientes adversos, con poca agua y en climas fríos. Además, está documentado que son el cultivo con más baja huella de carbono. Por último, el agua necesaria para su producción en considerablemente más baja en comparación con otras fuentes proteínicas, como la carne: se necesitan alrededor de 160 litros para producir 450 gramos de leguminosas, mientras se utilizan más de 6 mil litros para producir la misma cantidad de carne.
Con estos datos contundentes, no es de sorprender que la ONU haya nombrado el 2016 como el año de las legumbres. ¡Inclúyelas en tu comida!
Fuente: pulsepledge.com