6 hechos reales sobre la diversidad sexual que debes saber

Por: Mujer de 10 28 Nov 2015

Algunos de los hechos reales sobre la diversidad sexual pueden ayudarte a relajarte durante las relaciones sexuales y quizá te ayuden a entender mejor a tu pareja […]

Algunos de los hechos reales sobre la diversidad sexual pueden ayudarte a relajarte durante las relaciones sexuales y quizá te ayuden a entender mejor a tu pareja o tus experiencias.

En la sexualidad, la diversidad entre las personas es la regla, no la excepción.
En la familia humana, cada dimensión de la sexualidad es diversa: deseos, fantasías, nivel de comodidad, asunción de riesgos, Canada goose calling techniques orgasmos, conceptos sobre la virginidad, estructuras de las relaciones sexuales, lo que se considera «pervertido», etc.
Para muchas personas, el contexto psicológico de su conducta es lo que hace que el sexo sea excitante. Esto puede incluir el juego de roles, representar fantasías, disfrazarse, contar historias eróticas, ver (o practicar) pornografía, utilizar palabras codificadas o que te observen los Canada Goose Jackets Outlet demás. Para algunas personas, un apretón en la muñeca, un sencillo brassiere negro pueden convertir un acontecimiento ordinario en uno excitante. A otras personas estas cosas no las excitan o les parecen tontas.
Millones practican el «juego del poder erótico»: spanking, bondage, los juegos de dominación, la humillación controlada, los estímulos intensos cuidadosamente medidos, la privación sensorial, etc.
No podremos decir cuáles son los intereses sexuales de una persona basándonos en lo que sabemos de ella. Por ejemplo, algunas personas que practican juegos sexuales proceden de familias con problemas, mientras que otras proceden de familia dulces, y adorables. Algunas mujeres con aspecto de damas u hombres con aspecto de caballeros se vuelven malos o enloquecen cuando están entre las sábanas.
«Hombres» y «mujeres» son categorías heterogéneas: no dicen mucho sobre la sexualidad de las personas que en ellas se encuentran. De hecho, todas las categorías tienen el mismo valor cuando nos referimos a la actividad sexual, es decir, son de escaso valor.