Desde el lunes pasado en la Ciudad de México se prendieron focos rojos por los altos niveles de contaminación. Aquí te decimos qué hacer en caso de […]
Desde el lunes pasado en la Ciudad de México se prendieron focos rojos por los altos niveles de contaminación. Aquí te decimos qué hacer en caso de contingencia ambiental.
La última contingencia ambiental registrada en la Ciudad de México fue hace 14 años. Esta vez, en tan sólo dos días, llegamos a un nivel altísimo de partículas dañinas, y la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que estar expuestos a ellas aumenta los casos de cáncer de pulmón, enfermedades respiratorias y cardiovasculares. Si en estos días has tenido tos, irritación de ojos o garganta, dolor de cabeza, agotamiento y ataques de asma, se debe a la contaminación, y aunque estos síntomas desaparezcan, si la contingencia continúa, los daños en tu cuerpo también seguirán. Para reducir los efectos de la contingencia ambiental en tu cuerpo y en la ciudad, sigue estas recomendaciones, ¡es tarea de todos!
Las horas más críticas son de las 13:00 a las 19:00, así que durante ese tiempo evita:
Realizar ejercicios o actividades al aire libre que requieran grandes esfuerzos.
Se recomienda que niños y ancianos permanezcan en interiores.
Puedes utilizar un tapabocas para limitar la entrada de partículas como polvo a tus pulmones.
No fumes en espacios cerrados (aunque lo mejor es fumar lo menos posible).
Además de las recomendaciones para tu salud es importante disminuir la cantidad de contaminantes en la atmósfera. ¿Qué puedes hacer?
El Gobierno de la Ciudad de México puso en marcha el programa Hoy No Circula para limitar la cantidad de automóviles en la ciudad. ¡Respétalo, es por el bien de todos!
Utiliza transporte público: el Metro, Metrobús, trolebuses y tren ligero están dando servicio gratuito. Intenta salir antes o después de tu escuela o trabajo para evitar aglomeraciones. Ojo: tomar un taxi tú sola es como moverte en tu coche particular. Prefiere servicios como Uberpool.
Si no puedes dejar tu coche, ¡compártelo! Seguro puedes acordar una ruta con tus compañeros de la oficina. El camino al trabajo será menos solitario y, además, ¡pueden compartir gastos! Un win-win asegurado.
Si tu trayecto es menor a 8 km puedes transportarte en bicicleta. Contrario a lo que se cree, la bici es una de las actividades que menos te expone a los contaminantes durante la contingencia ambiental. Ojo: recuerda no esforzarte demasiado y evita calles muy transitadas.
¿Y las mascotas? Ellos tabién resienten la contaminación y debes cuidarlos.
Ahora que ya sabes qué hacer en caso de contingencia ambiental, ¡cuídate y cuídanos!
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