La jungla de asfalto a veces parece ser demasiado caótica, por fortuna la CDMX ofrece también lugares para los amantes de la naturaleza. Encontrar espacios de relajación y […]
La jungla de asfalto a veces parece ser demasiado caótica, por fortuna la CDMX ofrece también lugares para los amantes de la naturaleza.
Encontrar espacios de relajación y que te permitan estar en contacto con la naturaleza, no es tan difícil si vas a los sitios correctos, por eso mira estas recomendaciones para visitarlos:
Parque Bicentenario
Construído como consecuencia del cierre de una refinería y con el objetivo de reducir la contaminación ambiental, encontramos al norte de la ciudad este recinto, donde puedes hacer diversas actividades dentro de sus cinco jardines: en sus áreas deportivas, en el gimnasio al aire libre, asistir a algún evento en el auditorio abierto, pasear por su hermoso lago y llevar a los más pequeños a los juegos infantiles y arenero.
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Aviario Abraham Lincoln
El lugar ideal para alejares del caos por un momento, disfrutar el trinar de las aves y de la calma que ofrecen su pequeño riachuelo y cascada artificial. Aquí puedes toparte con pavo reales, periquitos australianos, canarios, gansos entre otras curiosas aves.
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Jardín botánico de CU
Destaca por ser el segundo jardín botánico más antiguo del país y por hacer constante investigación para la conservación de la diversidad vegetal. Además de recorrer las más de 1 600 especies de plantas y 300 que se encuentran amenazadas o en peligro de extinción, puedes asistir a actividades educativas para la preservación de especies.
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Ajolotarío de Xochimilco
Para los amantes de los ajolotes está el Centro de Investigaciones Biológicas y Acuícolas de Cuemanco (CIBAC), que estudia su riesgo de extinción y promueve la reproducción de esta especie. También se dedica a la preservación de fauna local como: «la rana de Moctezuma», “Mariposa de la coliflor”, el charal y el acocil.
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Mariposario de Chapultepec
La convivencia con estos pequeños insectos es una de las cosas por las que nos encanta este lugar, porque además de conocer sobre el proceso de su metamorfosis desde que son orugas hasta que abandonan el capullo, como parte del recorrido, visitas el Insectario que está de igual forma en el recinto.
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Amantes de la flora y fauna, ¡ya saben a dónde ir este fin!
Por: Daniela Guevara
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