En aquel entonces, Nina Freeman tenía 19 años y vivía en Nueva York. Le gustaba pasarse las noches jugando a Valtameri, un juego de roles en el cual era más conocida como “Cibele”. Ichi era un poderoso jugador que acostumbraba a ser el compañero de aventuras de Cibele en los mundos de Valtameri. Juntos pasaban las horas matando enemigos, subiendo de nivel y derrotando a jefes finales. Sin embargo, pasar días en ese mismo espacio virtual también les hizo estrechar su relación hasta nuevos terrenos. Cibele e Ichi comenzaron sentir una fuerte atracción mutua y comenzaron una relación por mensajes. Aunque nunca se conocieron en persona, sin duda esto marcó a Nina, quien ahora ha lanzado Cibele, un videojuego basado en esta experiencia. A partir de sus pláticas, sus vivencias y los sentimientos, Nina las recrea en este videojuego en el que tú también vivirás una relación online.