¿Te ha tocado ver un temazcal prehispánico? Esta es una de las joyas que puedes encontrar en la zona arqueológica de Teotenanango, vocablo que significa “el lugar de la muralla sagrada o divina.”
El sitio, que reúne 40 monumentos arqueológicos, fue rebautizado años después por los españoles como Tenango del Valle. Su riqueza radica en que guarda los vestigios de tres culturas, los teotenancas, los matlatzincas y los aztecas. Como si esto fuera poco, esta citada en distintos documentos nada más ni nada menos como el Códice Mendocino. Te compartimos 5 joyas del sitio para que te animes a visitarlo antes de que inicien las temporadas de lluvia.
Los vestigios de un poderío amurallado
Teotenango es uno de los sitios arqueológicos más grandes y mejor conservados de México. Para acceder a él hay que subir el pedregoso cerro de Tetépetl, lugar que los teotenancas eligieron para asentarse. Una vez recuperado el aliento quedé maravillada con esta asombrosa arquitectura que requirió de una gran labor de nivelación del suelo mediante la construcción de muros de contención así como de edificaciones en desnivel. El sitio gira alrededor de la Plaza del Jaguar y esta distribuido en dos conjuntos arquitectónicos denominados sección A, conformado por tres cuerpos escalonados en cuya superficie hay una plataforma utilizada para adoratorios y sección B que reúne habitaciones de personajes importantes. Cuenta también con un juego de pelota, un temazcal, el conjunto de la serpiente, que es el más grande de la zona con una longitud de 120 metros de largo por 40 de ancho, los relieves de un jaguar devorando un corazón y el de una serpiente, la Calle de la Rana y el resto de las habitaciones. Durante el período matlatzinca se construyó una muralla con paredes hasta de 10 metros de altura y 2 km de longitud.
Fotografías: Paulo Vidales
El Juego de pelota
Al pararme sobre lo que fue la cancha pude escuchar el palpitar de los corazones de esos guerreros que en el juego dejaban la vida. En los muros laterales aun está la energía de esos hombres que luchaban por alimentar a los dioses. Los aros de piedra se conservan en el Museo Dr. Román Piña Chan que está en las faldas del cerro. Mis pensamientos fueron interrumpidos por el rápido caminar de las iguanas y lagartijas que habitan en la zona. Al ver esos animales prehispánicos sentí que me había transportado al pasado y que en cualquier momento podría estar siendo observada por algún lugareño.
El Temazcal
Al verlo quedé sin aliento. Por supuesto he visitado varios de éstos baños de vapor prehispánicos; sin embargo, estar frente a los vestigios de uno original fue impactante. Ahí está el hueco central donde se depositaban las piedras y el canal de desagüe por donde salía el agua. Curiosamente su construcción fue anterior al juego de pelota, pero al verlo me hizo pensar en los baños de los jugadores actuales de fútbol soccer. De acuerdo a la placa que esta al lado, se cree que la estructura estuvo cerrada por muros de adobe y techada con laminas de madera.
Los rituales funerarios
Una de las plazas de la sección B se utilizó durante la ocupación matlatzinca y azteca como espacio funerario ahí se encontraron restos de entierros múltiples e individuales. Los cuerpos estaban acompañados con objetos de cobre, obsidiana y cristal de roca como ofrenda. El guía de turistas Arturo Toledo explicó que en el sitio se practicaban sacrificios humanos: “el sacerdote introducía un cuchillo consagrado por el espacio intercostal para llegar a las aterías, cortarlas y sacar el corazón aún latiendo y ponerlo en un incensario con copal”. Dentro del museo de sitio, Dr. Ramón Piña Chan, puede apreciar una impresionante representación de los ritos funerarios.
El Museo Arqueológico del Estado de México Dr. Román Piña Chan
La entrada al museo, construido en una planta donde se erigen 4 salas y un patio central, contrasta con la riqueza que encierra: la colección más importante de la cultura matlatzinca resultado de las excavaciones realizadas de 1970 a 1975 por el famoso arqueólogo mexicanos el Dr. Ramón Piña Chan. En ellas encontró cerámicas y esculturas teotihuacanas, matlatzincas, mexicas y aztecas. Las salas exhiben más de mil piezas; mis favoritas: una vasta selección de figuras humanas hechas en piedra, las representaciones de los dioses Matlanzincas, las puntas de obsidiana y la joyería. El museo fue inaugurado el 15 de Julio de 1975.
Tips para llegar
Zona Arqueológica de Teotenango
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- Continúa hacia Lerma –Tenango del Valle.
Toma la salida de Atenco y sigue los señalamientos hacia la zona arqueológica de Teotenango del Valle. ¡Prepárate para viajar al mundo prehispánico!
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