Cómo limpiar tus joyas de plata 925 para que brillen siempre

La plata 925 es un término que se refiere a la pureza de la plata utilizada en joyería.

El número 925 significa que el material está compuesto por un 92.5% de plata pura y un 7.5% de otros metales, generalmente cobre.

Esta mezcla se utiliza porque la plata pura (100%) es demasiado suave para crear objetos duraderos, por lo que se le añade una parte de otros metales para que resista y dure más ante el uso diario.

¿Qué tan buena es la plata de 925?

La plata de ley 925 es considerada una elección de alta calidad en la industria de la joyería por varias razones:

1. Calidad: Es una aleación bastante buena que contiene una buena cantidad de plata pura. Esto la hace más valiosa y deseada que las aleaciones de plata de menor calidad.
2. Durabilidad: La adición de otros metales la hace adecuada para la fabricación de joyas y objetos que deben soportar el desgaste del día a día.
3. Brillo y belleza: Tiene un brillo muy llamativo, y seguro esos aretes y collares tan brillantes y plateadas que usan tus estrellas favoritas son de plata 925, pues es popular en la fabricación de joyas.
4. Hipoalergénica: Puede que alguien, muy rara vez, resulte alérgico a este material, pero generalmente se considera hipoalergénica y es una opción segura para la mayoría de las personas con sensibilidad a los metales.
5. Marca de autenticidad: Suele llevar una marca de autenticidad, como «925» o «Sterling», que garantiza su calidad.

Es importante tener en cuenta que este tipo de plata todavía puede oxidarse o empañarse con el tiempo debido a la interacción con los elementos del ambiente, lo normal. Este es un proceso natural que se puede eliminar mediante la limpieza adecuada.

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Para mantener la plata 925 brillante y en buen estado, aquí te dejo algunos consejos sobre cómo limpiarla:

La mejor manera de mantener la plata 925 brillante es usar las piezas. El roce con la piel y la ropa ayuda a prevenir que se llenen de suciedad y óxido.

Para la limpieza regular, puedes usar agua tibia y un jabón suave.

Lava la pieza con agua tibia y jabón, sécala con cuidado con un paño suave y limpio. No guardes tus accesorios hasta que no estén bien secos.

No uses químicos abrasivos o limpiadores que tengan amoníaco, lejía o cloro, ya que pueden hacer que la plata se vea opaca.

Hay paños de limpieza especialmente diseñados para la plata 925. Están impregnados con químicos que ayudan a eliminar el óxido y a pulir la plata para que recupere su brillo.

Para quitar manchas más tercas o el óxido leve, puedes hacer una pasta suave mezclando bicarbonato de sodio y agua.

Aplica la pasta sobre la pieza de plata con un paño suave y frota suavemente. Enjuaga y seca bien.

Puedes usar limpiadores que venden en los supermercados, diseñados específicamente para la plata 925. Sigue las instrucciones del producto.

Guarda tus joyas en un lugar seco y evita el contacto con productos químicos como perfumes, lociones, cloro y productos de limpieza, ya que estos pueden dañar la plata.

Siguiendo estos consejos, puedes mantener tu plata 925 en buen estado y asegurarte de que brille siempre. Recuerda que la limpieza suave y regular es la clave para preservar su belleza.