5 cosas básicas que debes hacer antes de emprender

¿No sabes ni por dónde empezar o te sientes frustrada porque todos tus proyectos no logran desarrollarse como tú esperas? Hoy te dejamos este artículo de Karla Huerta, una joven empresaria mexicana de 25 años con 5 empresas y muchas metas por delante. Checa sus recomendaciones. 

En mis años como emprendedora, me di cuenta que he madurado muchas actitudes y aun así creo que nunca vamos a estar
completamente listas para empezar, pero sin duda hay cinco cosas que no podemos perder de vista si vamos a emprender.

Hoy con 4 empresas bajo mi cargo, me he dado cuenta que sigo sin estar lista para muchos de los saltos que me toca dar, pero poco a poco he ido entendiendo que nada se gana con quedarme sentada viendo las oportunidades pasar.

 

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Quiero compartir algunos puntos, de cosas que quiero que, tú, que estás pensando en emprender o estás en tus primeros pasos, empieces a trabajar. Y si ya eres emprendedora, ¡también trabájalos! El crecimiento nunca está de más.

1. Aprende a trabajar.
Sí, el emprendimiento es una montaña rusa y a veces hay picos de motivación máxima y caídas en donde queremos tirar todo por
una ventana. Muchas veces sentimos que con hacer un post en redes sociales, ya trabajamos, y dejamos de lado el verdadero trabajo que deber de hacerse.

Comienza con cosas pequeñas; el trabajo más fácil de completar es el que tenemos proyectado inmediatamente. No dejes las cosas a la mitad y convierte esto en tu rutina. Si ibas a lavar los platos diario: son todos los platos y es diario, fin. Lo mismo pasa en el trabajo; haz un semáforo de metas en donde con ROJO marques las tareas o metas que tienes planeadas pero aún no comienzas y no quieres olvidarlas; el AMARILLO para las que están en proceso pero aún no terminamos y VERDE para las que ya estas
haciendo. Cuando las acabes, bórralas.

2. Crea el hábito de accionar.
En nuestra sociedad tenemos la bonita costumbre de “hablar mucho y hacer poco”. Con frecuencia decimos “Sí, hagamos ese proyecto”, “Yo empiezo con esto y tú con aquello” y nunca se hace nada. Yo hice un pequeño juego mental conmigo misma, en donde me reto a cumplir con todo lo que digo. Me gusta la satisfacción que me da el decir cosas y saber que las voy a cumplir. Crea el hábito de hacer todo lo que le prometes a alguien más o a ti misma. Cuando tengas esto como rutina, entonces será más fácil comprometerte con un emprendimiento.

3. Empieza a jugar con los problemas.
Tener una marca es un reto continuo, pero es más interno de lo que creemos. La gente no siempre va a coincidir con nosotras y ¡está bien! Cuando tengo un problema, literalmente, me tomo tres segundos, respiro tres veces y me acuerdo que estoy en una
posición de decisión y que hoy puedo cambiar vidas, empezando con la mía, y que sea lo que sea que yo quiera, depende de mí y no de alguien más. Fuera de victimizar la situación o victimizarme a mí, me emociona resolver.

4. Hazte adicta a aprender, pero aprender enfocada.
Como digo en mis conferencias: de escuchar tu canción favorita por octava vez en un día a escuchar un cachito de un podcast de liderazgo, mejor escucha ese cachito de podcast, ¡tTodo suma! Pero si apenas estas estás aprendiendo a hacer tu página web, estás descubriendo posibilidades en redes sociales o no tienes idea de cómo sacar los costos de tu emprendimiento, ¿por qué no empiezas a consumir ese contenido en específico que te hará crecer?

5. Respeta el proceso.
Hay que empezar bien… Tranquila, sé que las redes y todo lo que nos rodea, nos ha enseñado a ser inmediatas y hay veces que está increíble, pero no por eso hay que correr, ¡y mucho menos con el emprendimiento! Por favor huye de los tik toks con títulos que digan: “Como emprender en dos días”, “Tres pasos para ser millonaria” o “Como me volví rica en una semana emprendiendo”. Esto no se trata de magia, es chamba y es estructura. Antes de irnos por lo visual, empecemos con la base que va a sostener todo. Todos los pasos que des, dalos firmes e informada.