Cambiar de anticonceptivos o empezar con un método hormonal por primera vez nos puede traer una serie de efectos secundarios que muchas veces nos puedes desequilibrar. Si sientes que tu humor está cambiando, te sientes triste o simplemente que algo no va bien, el culpable puede ser ese cambio hormonal. Checa estas 4 señales súper comunes de que algo no va bien.
Cambiar de anticonceptivos o empezar con un método hormonal por primera vez nos puede traer una serie de efectos secundarios que muchas veces nos puedes desequilibrar. Si sientes que tu humor está cambiando, te sientes triste o simplemente que algo no va bien, el culpable puede ser ese cambio hormonal. Checa estas 4 señales súper comunes de que algo no va bien.
- Tu humor va de un extremo a otro
Si tu día es un constante cambio entre sentirte feliz y luego al borde de la depresión, temo decirte que algo no va del todo bien. A pesar de que esto se puede desarrollar por múltiples razones, también el culpable puede ser ese método anticonceptivo que decidiste probar recientemente.
Esto le pasa al 10% de las mujeres por que son intolerantes a la progesterona y los anticonceptivos pueden terminar desequilibrando absolutamente todo.
2. Peleas mucho más con tu pareja de lo normal
Si normalmente no te la pasas peleando con tu pareja, entonces significa que algo no va del todo bien. Si te acabas de poner el DIU y ahora siempre estás de malas o súper sensible por que la mosca está pasando, puede ser que no seas tú. Así que mejor consulta a tu médico porque es probable que tu anticonceptivo esté interfiriendo con cómo te sientes.
3. Te sientes deprimida
Si nunca has estado deprimida, seguramente lo reconocerás al instante: estás irritable y todo parece una tragedia a tu alrededor. Y una forma de detectar que puede ser a causa de tus anticonceptivos hormonales es que no sabes ni por qué te está pasando. Dejas de disfrutar de las cosas a tu alrededor, duermes muchísimo y estás totalmente decaída. Así que si es tu caso, mejor ve a tu médico cuánto antes.
4. Irritabilidad
Si estás irritable (más de lo normal), todo te enoja fácilmente o te desesperas de más, también es una señal de que tus anticonceptivos están impactando desfavorablemente. Si tus niveles de estrógeno están altos es posible que se afecten tus hormonas y también se desequilibren. Así que no creas que es normal y consúltalo con tu ginecólogo.
Lo ideal es estar al 100% con nuestra salud mental y nuestra vida, por lo que si algún método no te está funcionando del todo, lo mejor es cambiarlo. Consúltalo con tu médico y cuéntale cómo te sientes para que pueda asesorarte y encontrar el método que mejor se adecue a tu estilo de vida.
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