¡Ya deja de fumar! El tabaco te afecta tanto y como nunca imaginaste; por dentro y por fuera. Conoce las consecuencias del cigarro y evita verte fea. Te sentirás mejor contigo misma.
Fumar es uno de los hábitos que sin duda debes romper para mejorar tu salud. Como ya te imaginarás, el cigarro te lastima silenciosamente, y aunque tú no lo notes, te hace ver horrible. No es tanto el hecho de tener uno en la mano, sino que hay personas que no tienen control. Recuerda que el exceso casi siempre es malo. Checa las consecuencias del cigarro y te aseguro, que pensarás dos veces si quieres o no fumar; tu salud y belleza son las partes que más la pagan. Se trata de verte bonita 24/7.
Para empezar, no descansas. Los compuestos del cigarro probablemente te causen insomnio, por ende, tendrás ojeras inmensas. Llegará un punto en el que ni el mejor maquillaje logrará ocultarlas.
Para ser sincera, ya sabíamos que bajar de peso es participar en una lucha sin fin; con el cigarro mucho más. Si fumas, créeme que no saldrás vencedora. Existe la posibilidad de que éste aumente tu peso o sólo que sea muy difícil reducir talla.
Una de las consecuencias del cigarro, que por cierto es muy conocida, es el color amarillo de los dientes. ¡Es horrible! Suficiente es que algunos alimentos, bebidas y chatarra te los pintan, como para todavía aumentar la pigmentación con tabaco. ¡Cuídate! Llegará un punto donde de plano no podrás salvar tus dientes.
¿Te preocupan las celulitis? ¿Te importa si tus bubis o pompis lucen o están caídas? Señorita, déjame decirte que son las consecuencias del cigarro. El arduo ejercicio y los tratamientos para combatir la flácidez, ya no tendrán lugar si el cigarro sigue siendo prioridad. La nicotina reduce la circulación.
Se llama envejecimiento prematuro. Después de un cigarro, tu piel se va deshidratando, es por eso que comienzan a salir las arrugas. No son muy agradables. Las primeras zonas afectadas serán los ojos (las famosas patas de gallo) y la boca. ¡Iuuug!
Las mujeres sufrimos muchísimo por los puntos negros, espinillas y algunas por la piel grasa o el brillo. Si fumas, ya estuvo que padecerás demasiado de esto. Incluso, es probable que si no es tu caso pero convives mucho con personas fumadoras, te afecte de la misma manera. El cigarro ensucia y oxida tu piel; tómalo en cuenta.
Sí, así como lo lees. No sólo te tiñe de amarillo los dientes. Tu barniz no es el que deja rastros de color amarillento, es el cigarro. No, tampoco son hongos.
Con un sólo cigarro basta para que el olor quede profundamente penetrado en tu ropa o en tus manos. Imagina todo lo que pasa si fumas en exceso. Llegará un punto donde por más perfume que uses, apestarás. No es nada bonito. De hecho, el olor hasta se impregna en tus objetos y/o accesorios.
Otra de las consecuencias del cigarro que te harán pensar seriamente esta situación es, el daño que éste le provoca a tu cabello. Además de oler cañón a tabaco, se debilita. Se cae en grandes cantidades y se vuelve súper delgado. Pierde brillo, pierde vida.
Dile adiós a las buenas rutinas de ejercicio y sexo. El cigarro, sin importar cuánto fumes, te impide rendir al cien.