El problema es que hay más gente interesada que gente interesante. De tanto ahorrar en educación nos hemos hecho millonarios en ignorancia. ¿Qué importan los años? Lo […]
El problema es que hay más gente interesada que gente interesante.
De tanto ahorrar en educación nos hemos hecho millonarios en ignorancia.
¿Qué importan los años? Lo que realmente importa es comprobar que al fin de cuentas la mejor edad de la vida es estar vivo.
Hay mujeres tan complicadas que cuando se les aparece el príncipe azul, resulta que no es el tono de azul que querían.
La idea sería tener el corazón en la cabeza y el cerebro en el pecho. Así pensaríamos con amor y amaríamos con sabiduría.
El problema de las mentes cerradas es que siempre tienen la boca abierta.
No porque exista el perdón, la gente tiene derecho a dañarnos las veces que quiera.
Algunas personas no han entendido que la tierra gira alrededor del sol, no de ellas.
Uno de los problemas ortográficos de la vida, es no saber donde poner el punto final.
El ignorante critica po que cree saberlo todo, en tanto que el sabio respeta porque reconoce que puede aprender algo nuevo.