En relaciones que pasan por un momento negativo, es ingenuo pensar que uno de los dos es el único culpable de lo que ocurre entre ustedes. A […]
En relaciones que pasan por un momento negativo, es ingenuo pensar que uno de los dos es el único culpable de lo que ocurre entre ustedes. A continuación te comparto algunas ideas para mejorar tu relación y salir del enredo que quizás se encuentran ahora.
1. Hablen de lo que está pasando entre ustedes, de lo que piensan, de lo que sienten y la experiencia que vive cada uno al estar juntos. Una vez compartidos estos puntos, busquen algo que a los dos les interese en este momento, algo que les preocupe de igual manera -pueden ser los hijos o la economía familiar-, y de esta empatía empiecen a caminar hacia adelante.
2. Digan qué necesitan. No compartir sus propias necesidades es tóxico para la relación. Las parejas a veces tienden a no decir sus sentimientos, pensamientos, deseos y necesidades y expresarlos directamente al otro. Cuando se guardan los resentimientos, el enojo aparece en la relación de pareja.
3. Eviten culparse uno al otro. Algunas parejas van anotando las ofensas y culpas que reclamar al otro en un futuro próximo, catalogan cada herida u ofensa y lo guardan para usarlo en contra del otro. Es importante que se den cuenta de la inutilidad de la culpabilización.
Si están atorados con esto de culpabilizarse, construyan una forma de comunicarse por turnos, eligan un tema y cada uno tenga cierto número de minutos para poder hablar y que el otro sólo escuche. Cuando termine su turno, que el otro haga lo mismo. Con esto se busca establecer una igualdad en la forma de comunicarse, si el poder está sostenido predominantemente por uno de los miembros, la posibilidad de intimidad disminuye.
4. Paren cuando estén discutiendo. Otra idea para mejorar su relación es empezar por reconocer el estado actual en el que están. No tiene ningún sentido seguir culpándose el uno al otro, ya que sólo aumentan la resistencia de escucharse mutuamente, magnifican los problemas y se hace más grande la brecha que los separa.
5. Establezcan los límites de su relación, ya que determinan como están ustedes en el mundo. Por ejemplo, una pareja con límites permeables permite la intromisión de los demás. Las parejas con límites rígidos tienen vidas secretas por estar muy aislados del mundo exterior. Para tener una mejor idea de cómo están ustedes, revisen el espacio relacional y la influencia de sus respectivos padres, familias e hijos en sus problemas. Revisen también cómo es su forma de comunicarse entre ustedes, cómo suenan sus voces, cómo se hablan entre sí, cómo se interrumpen o no dejan hablar al otro, cómo son sus movimientos corporales… La calidad y cantidad de energía cuando están juntos, muestra cómo está el contacto mutuo.
6. Quiten su atención de lo que el otro hace mal. Es más efectivo hacer un ejercicio de autoobservación y revisar qué están haciendo individualmente mal, así como reconocer qué les aporta y les enseña su pareja día a día. Reconocer lo que el otro tiene y viceversa, es una manera de ver cómo se complementan y seguir aprendiendo el uno del otro.
7. Acepten las diferencias no reconciliables. Pueden amarse y respetarse, aprendiendo a aceptar la realidad de que no todos los problemas tienen solución. Las diferencias son esenciales para una relación madura, pues mantienen viva un relación, pero llevadas al extremo conducen a una ruptura irreparable.
Prueba estas ideas para mejorar tu relación, aplíquenlas juntos y vean si les funcionan. Recuerden que la comunicación y el bien mutuo deben imperar sobre todo.
Joseph Estavillo es psicoterapeuta humanista-Gestalt y Coach. Tiene especialidad en terapia de pareja y certificación en Coaching Ontológico Multidimensional. Contáctalo en jhestavillo@gmail.com
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