Hablar de sexualidad no está mal, nada mal
Hablar abiertamente sobre tus deseos sexuales puede parecer incómodo, especialmente si creciste en un entorno donde el tema era tabú. Sin embargo, algunos sexólogos y terapeutas de pareja, aseguran que aprender a comunicar lo que te gusta y lo que no en la intimidad es esencial para construir relaciones sanas, satisfactorias y respetuosas. Si aún te cuesta romper el silencio, aquí te explicamos cómo hablar de tus deseos sexuales sin sentir culpa ni pena, y por qué hacerlo puede transformar tu vida íntima.
¿Qué son los deseos sexuales?
Los deseos sexuales son aquellos pensamientos, fantasías o necesidades físicas y emocionales relacionadas con la experiencia del placer, la intimidad y el erotismo. No se trata solo de actos físicos: también incluyen lo que nos atrae, lo que nos da curiosidad y lo que necesitamos para sentirnos conectadas y satisfechas.
Si bien, están presentes gran parte de nuestra vida pueden cambiar con el tiempo. Debido a que, están profundamente influenciados por factores como nuestras experiencias, valores, entorno cultural y, por supuesto, el tipo de vínculo que mantenemos con nuestra pareja.

Juguetes Sexuales: Empoderando a la mujer a través del control de su sexualidad
5 consejos para hablar de deseos sexuales sin juicio o pena
1. Reconoce que tus deseos sexuales son válidos
El primer paso es entender que tus deseos, fantasías o curiosidades sexuales no tienen nada de malo. Mientras todo se base en el respeto y el consentimiento mutuo, no hay razón para sentir vergüenza. La sexualidad es parte natural del ser humano, y validarla es clave para tu bienestar emocional y físico.
2. Elige el momento y entorno adecuado
Toda conversación incómoda merece un espacio seguro y una charla íntima no es la excepción. No es necesario que ocurra en la cama ni durante el sexo. Busca un momento relajado donde ambos estén abiertos al diálogo. Esto ayuda a que la comunicación fluya sin tensión ni malentendidos.
3. Habla desde tu experiencia, no desde la exigencia
Usa frases en primera persona: “A mí me gustaría…”, “Me siento cómoda cuando…”, “Me da curiosidad probar…”. Esto evita que tu pareja lo sienta como una crítica o presión, y abre la puerta a que también se exprese sin sentirse juzgada.
4. No esperes una reacción perfecta (y prepárate para escuchar también)
Tal vez tu pareja necesite tiempo para procesar lo que compartiste. Es importante validar también sus emociones y fomentar una comunicación de doble vía. Según expertos, la sexualidad compartida crece cuando ambas partes se sienten escuchadas.
5. Infórmate y normaliza el tema y el diálogo
Incluir el tema de la sexualidad en tu rutina, ya sea leyendo libros, viendo contenido educativo o escuchando podcasts, hará que te sientas más segura al hablarlo. Y al compartirlo con tu pareja será más sencillo llegar a acuerdos y actos que los hagan sentir cómodos y satisfechos en todos aspectos. Los especialistas coinciden en que la educación sexual para adultos ayuda a desmontar mitos y a liberar culpas.

¿Por qué es importante hablar de sexualidad en pareja?
De acuerdo con la Dra. Laura Aguilar: «Hablar de sexualidad no es hablar solo de sexo, sino de intimidad, placer y cuidado emocional. Las parejas que se comunican en este tema construyen vínculos más sólidos y duraderos.»
Asimismo, el Lic. Enrique Téllez, sexólogo con especialidad en terapia de pareja indica: «La represión de los deseos sexuales por miedo al juicio o al rechazo puede generar conflictos, baja autoestima e incluso disfunciones sexuales. Hablar del tema reduce el estrés y fortalece la conexión erótica.»
Además, cuando ambas personas conocen y respetan sus límites y deseos, la experiencia se vuelve mucho más satisfactoria para los dos.

Para concluir, recuerda que los deseos sexuales no son motivo de culpa ni vergüenza. Al contrario, son una parte vital de nuestra identidad y bienestar. Cuando se comparten desde el respeto, fortalecen la confianza, elevan el placer y abren la puerta a una sexualidad más plena.
¿Estás lista para hablarlo con tu pareja?
¿Cómo hablar de sexualidad con tus hijos?