Seguro has escuchado hablar del tantra, de esa práctica sexual que promete llevarte al éxtasis total con tu pareja y a una comunión total con ella. Pero, […]
Seguro has escuchado hablar del tantra, de esa práctica sexual que promete llevarte al éxtasis total con tu pareja y a una comunión total con ella. Pero, ¿cómo practicar el sexo tántrico? ¿Qué deben hacer exactamente para gozarlo? Toma nota…
El sexo tántrico, lejos de creencias mágicas y doctrinas yógicas, consiste simplemente en trasladar el sexo con tu pareja a una relación más espiritual o mística en donde logren compenetrarse en cuerpo, mente y alma, fusionarse y experimentar un placer total. No hay uno que disfrute más o menos. La intención es que ambos disfrutan y viven la experiencia por igual. Sobre todo, lo bello es que la unión va más allá de lo físico, pues la intensidad que se logra con el sexo tántrico es inigualable.
Preparativos para el sexo tántrico
Lo primero es crear un ambiente acogedor y romántico en el que los dos se sientan cómodos y seguros. Pueden encender velas, inciensos, aromatizantes, llenar de flores… Tengan a la mano aceites aromáticos, bálsamos comestibles, juguetes sexuales, agua para beber, vino y comida (mira estos 10 alimentos que puedes usar durante el sexo).
Es importante que se tomen su tiempo para el encuentro sexual, que no tengan prisa y que se sientan tranquilos, para disfrutar de ese momento solo para ustedes. Desconéctense del mundo: Apaguen celulares y cualquier alarma que pueda interrumpir su sesión, cierren las puertas y no estén para nadie.
¿Cómo practicar el sexo tántrico?
No hay un orden como tal, ni instrucciones precisas porque el chiste es fluir con el momento, los sentidos y lo que baya deseando la pareja. Pero sí hay elementos característicos del sexo tántrico, que debes poner en práctica para vivirlo plenamente. Los describiremos uno a uno, pero no necesariamente deben llevarse a cabo en ese orden.
Uno de estos elementos son las caricias. Se dice que en la yema de los dedos fluye nuestra energía bienhechora hacia el otro. Es por eso que las caricias con la punta de los dedos es sumamente estimulante y más erótica de lo que imaginas. Algunos consejos breves previos al sexo tántrico incluyen acariciarse en pequeños círculos, rozar su cuerpo piel con piel, olerse, morderse, besarse… Disfruten este encuentro al máximo, con calma. El objetivo es intimar y comenzar a unirse en un mismo cuerpo, haciéndose uno solo.
Otro elemento básico e importantísimo del sexo tántrico es la respiración, que se vuelve una sola, se acompasa y va marcando el ritmo del encuentro. Los expertos recomiendan hacer ejercicios juntos para lograr sincronizarse. Siéntate frente a tu pareja y respiren en forma pausada y acompasada: cuando tú exhalas, él inhala. Cierren los ojos y sientan cómo la energía va recorriendo su cuerpo. Concéntrense en la meditación de la respiración. Vayan acercándose poco a poco, hasta unir su boca y darse aire mutuamente. ¡Es delicioso!
Foto: Fotolia
Aquí viene otro elemento, los besos. Mírense a los ojos y bésense. Descubran nuevas sensaciones, recorran con los labios la piel del otro y belenes todo el cuerpo. Enciendan la llama del deseo hasta que ya no puedan más.
Para el momento de la penetración, deténganse un poco, descansen, respiren lentamente y aunque estén sumamente excitados, hagan todo de forma lenta, esto volverá más delicioso el momento del éxtasis. «La primera penetración debe ser estática. El pene deberá quedarse inmóvil dentro de la vagina, mientras la pareja continúa acariciándose, besándose y sintiéndose de manera suave», comentan los tantristas. Lo ideal, según ellos, es que este paso dure al menos media hora. ¿Imposible? No. Ése es el chiste del sexo tántrico, que se tomen su tiempo y disfruten sin prisas, poco a poquito, elevando el deseo hasta el cielo.
De hecho, uno de los objetivos del tantra para los hombres es evitar eyacular, para aprender a controlar la energía y permanecer horas y horas en el sexo sin acabar. Esta es una técnica algo compleja que requiere práctica, por eso la mencionaremos en otra ocasión. El consejo es que tampoco se claven en esto, sino que disfruten de su encuentro sin pensar en llegar al orgasmo, enfocados en las sensaciones de todo el cuerpo, de su respiración y de la conexión que formarán tu pareja y tú.
El tantra es una práctica sexual y espiritual sumemente íntima, sanadora y deliciosa para compartir con esa persona especial. Si tú la has experimentado, nos encantaría que compartieras tus impresiones y qué te dejó la experiencia.
